El Terremoto de Aiquile de 1998 fue un sismo registrado el 22 de mayo de 1998 a las 00:40 horas. Su epicentro se localizó en el centro de Bolivia a 150 kilómetros km de la ciudad de Cochabamba,[2] y a 35 km de profundidad.[3] El terremoto es considerado el peor terremoto del siglo XX de Bolivia.[4]
Terremoto de Aiquile de 1998 | ||
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6,8 en potencia de Magnitud de Momento (MW) | ||
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Parámetros | ||
Fecha y hora | 22 de mayo de 1998 | |
Profundidad | 35 km | |
Coordenadas del epicentro | 17°43′52″S 65°25′52″O / -17.731, -65.431 | |
Consecuencias | ||
Zonas afectadas | Aiquile y Totora | |
Víctimas | 124 muertos[1] | |
El siniestro que tuvo una magnitud de 6,6 grados en la escala de Richter dejó 124 personas fallecidas. Las localidades más afectadas fueron Totora y Aiquile, aunque los daños se registraron en tres provincias del departamento de Cochabamba al centro de Bolivia: Campero, Carrasco y Mizque.[5] Aiquile y Totora sufrieron el derrumbe del 80% de las viviendas.[6][7] El número de damnificados alcanzó las 15.000 personas. El 23 de mayo se declaró duelo nacional de tres días por el desastre.[8]
En mayo de 2023 se realizó una recapitulación a 25 años del terremoto. En diversos trabajos periodísticos se recordó que la comunidad internacional se solidarizó con los damnificados, sin embargo la cooperación no llegó a los pobladores de los lugares afectados, ni a sus comunidades.[9]
Durante la gestión del evento existieron muchas irregularidades y desde entonces se realizaron investigaciones para esclarecer el rol de instituciones como la Prefectura del Departamento de Cochabamba, el Ministerio de Defensa y la de Dirección de defensa civil.[10]
Se establecieron al menos 21 procesos penales, civiles y administrativos para el esclarecimiento de las irregularidades identificadas.[9][11]
Tras en evento se iniciaron al menos diez procesos de investigación y a lo largo de la historia se identificaron diferentes tipos de irregularidades que desviaron o comprometieron la integridad de los fondos destinados a la población, entre ellos: Fondos entregados por las damas niponas al embajador de Bolivia en Japón, donación del banco Interamericano de Desarrollo, fondos donados por: Austria, Alemania, Bélgica, China, Canadá, Dinamarca, España, Francia, Inglaterra e Italia, así como donaciones de la Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud, se estimó en casi 6 millones de dólares las donaciones económicas sobre suyo destino no se cuenta con documentación de respaldo.[10]
Adicionalmente donaciones de materiales y alimentos tuvieron un manejo que no fue claro, eficiente o suficiente para los daños que enfrentó la población.[10]
También se apuntó que existieron actos de corrupción cometidos por funcionarios y militares, del gobierno de Hugo Banzer Suárez quienes se habrían apropiado de los alimentos, medicamentos e incluso utilizaron 2.9 millones de dólares para la compra con sobreprecio de un avión Beechcraft 1900 a medio uso y cuya utilidad para la gestión del desastre fue cuestionada, estos eventos en su momento suscitaron indignación generalizada en la población.[12][13] Tras la identificación del hecho el avión fue vendido y los fondos destinados a los tres municipios afectados.[14]
El ministro de defensa de Banzer, Fernando Kieffer, falleció durante el juicio por corrupción, en el que se lo acusó de daño al Estado por un total de 7 millones de dólares.[15]
Aiquile, Mizque y Totora reconstruyeron sus municipios y retomaron manifestaciones culturales populares para promover el movimiento económico. De esta forma, danzas tradicionales, festividades y expresiones artísticas permitieron la reconstitución del tejido social. Iniciativas como el Festival Nacional del Charango en Aiquile y el Festipiano en Totora nacieron de esta necesidad.[12]
Paralelamente las autoridades locales continuaron realizando reclamaciones para que los fondos recaudados y donados para mitigar las consecuencias del sismo, con diferentes resultados para cada fondo o donación.[10]