Siete canciones tempranas (en alemán, Sieben frühe Lieder) fueron compuestas por Alban Berg entre 1905 y 1908.
Se trata de una serie de siete canciones que escribió mientras recibía lecciones de Arnold Schoenberg. Una de las composiciones más accesibles de Berg es hoy favorita en la sala de conciertos y recitales.
La versión para voz y piano
La versión orquestal
Las partituras están escrita para soprano con acompañamiento de piano y posteriormente orquestadas en 1928. Algunas mezzosopranos con facilidad en el registro agudo también las interpretan, tal el caso de Anne Sofie von Otter y Susan Graham.
La versión revisada fue escrita para la voz alta, soprano y los siguientes instrumentos:[2]
Las siete canciones que conforman esta pieza musical son:
Este pequeño ciclo sintetiza la combinación del legado tonal de Berg con la innegable influencia de Schoenberg y su evolución posterior hacia el dodecafonismo. Estas siete canciones llevan la influencia de Richard Strauss, Gustav Mahler, Hugo Wolf y Claude Debussy siendo un compendio de las armonías del ultrarromanticismo del fin del siglo XIX y principios del siglo XX. Según Theodor Adorno cada canción evoca un mundo y una atmósfera diferentes correspondiente a la naturaleza de los poemas en que se basan que fueron escritos por poetas distintos. El ruiseñor evoca a Johannes Brahms y Robert Schumann, Oda al amor y Noche al impresionismo y las demás se acercan al lenguaje de Schoenberg.[3]