El ratel (Mellivora capensis), también conocido como tejón de la miel o tejón melero, es una especie de mamífero carnívoro de la familia Mustelidae propio de África, Oriente Medio y el subcontinente Indio. Es la única especie actual de su género y de su subfamilia (Mellivorinae).
Ratel | ||
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Rango temporal: Plioceno-Reciente | ||
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Estado de conservación | ||
![]() Preocupación menor (UICN 3.1)[1] | ||
Taxonomía | ||
Reino: | Animalia | |
Filo: | Chordata | |
Subfilo: | Vertebrata | |
Clase: | Mammalia | |
Orden: | Carnivora | |
Familia: | Mustelidae | |
Subfamilia: |
Mellivorinae Gray, 1865 | |
Género: |
Mellivora Storr, 1780 | |
Especie: |
M. capensis (Schreber, 1776) | |
Distribución | ||
![]() Distribución del ratel | ||
Subespecies | ||
Es de cuerpo alargado y robusto. Suele medir unos 85 centímetros de longitud y 30 centímetros de altura. Un macho adulto llega a pesar 14 kg; las hembras, por su parte, no alcanzan los 9 kg. Tiene cabeza larga, patas cortas y fuertes, con dedos provistos de uñas sólidas muy aptas para excavar, y una corta cola. Su pelaje es gris en la cabeza, cuello, dorso y cola. Las partes inferiores son casi negras, y entre ambas zonas existe una línea muy clara, casi blanca.
Está ampliamente distribuido en África, encontrándose en la mayor parte del África subsahariana desde el sur de Marruecos y Argelia hasta Sudáfrica.[1] En Asia se encuentra en la península arábiga, Jordania, Palestina, sur de Líbano, Irak, Irán occidental, Azerbaiyán, Turkmenistán, Pakistán, India y Nepal.[1]
Su dieta pasa desde grandes presas a, en ocasiones, carroña, aunque su plato preferido lo encuentra destrozando colmenas. Su costumbre de saquear colmenas para alimentarse de miel les ha llevado a enfrentarse con los apicultores, que a veces les disparan, les ponen trampas o los envenenan. Pese a su gusto por la miel es principalmente carnívoro y devora cualquier animal, incluyendo roedores, aves, pequeños antílopes, lagartos, tortugas, ranas, serpientes e invertebrados. Comen también alimentos vegetales como las bayas, raíces y bulbos.[2]
Para cazar roedores como los jerbos y ardillas de tierra, excavan sus madrigueras. Son capaces de alimentarse de tortugas, sin dificultad, debido a sus poderosas mandíbulas. Puede matar a las serpientes venenosas, como las cobras, o las más grandes; se registró, por ejemplo, como un ratel mató y se comió una pitón de 3 m de longitud.[2] Devoran todas las partes de sus presas, incluyendo la piel, pelo, plumas, carne y huesos, sosteniendo su comida con sus patas delanteras. Cuando buscan alimentos vegetales, levantan piedras o rompen la corteza de los árboles.[2]
Se cree que el tejón de la miel desarrolla cierta inmunidad al veneno de algunas serpientes a lo largo de su vida, aunque no se ha demostrado el mecanismo fisiológico exacto que lo produce.[3]
Los rateles son considerados el "paradigma de la ferocidad", ya que hacen reflejo de ella en cada acto, son tenaces y resistentes ya que nunca dejan escapar una presa. Son famosos por su dureza. Se les ha visto peleando con animales con un tamaño mucho mayor como leones, leopardos, osos o tigres.[4]
En 2002 fue incluido en el libro Guinness de los récords como: "most fearless animal in the world" (el animal más valiente del mundo).
Es un animal generalmente nocturno, aunque cambia su actividad durante las épocas secas y frías, en las cuales se convierte en diurno.[3]
Normalmente es solitario, el mayor nivel de interacción es que la hembra se alimenta junto a su cachorro o que, durante la época de apareamiento, macho y hembra cacen juntos.[3]
Los rateles aparecieron por primera vez en el Plioceno medio en Asia. Sus parientes más próximos conocidos son los extintos géneros Eomellivora, conocido desde el Mioceno, y que evolucionó a varias especies hasta el Plioceno tanto en el Viejo como el Nuevo Mundo,[5][6][7] y Howellictis, conocido del Mioceno tardío del centro de África.[8]
Se conocen 12 subespecies de ratel:[9]