El juego de parejas (también conocido sencillamente como parejas) es un ejercicio y espectáculo ecuestre surgido y practicado en la corte española.
El juego tiene su origen en los conocidos como ballets ecuestres surgidos en el siglo XVII. El que sería como juego de parejas surgió en la corte española en el siglo XVII.[1][2]
La fundación y desarrollo de las reales maestranzas de caballería en este siglo, destinadas a ejercitar a la nobleza en el arte ecuestre, favoreció una mayor difusión del juego de parejas en los ámbitos de influencia de las maestranzas.[3]
El juego alcanzaría su cénit desde 1767 en que se comenzó la celebración anual de un juego de parejas en el palacio de Aranjuez. La función anual celebrada el 6 de junio de 1770 en Aranjuez sería representada en una pintura de Luis Paret y Alcázar que muestra la brillantez del ejercicio presenciado por la familia real y la corte. La función de ese año, según muestra la pintura de Paret, se ejecutó en un campo de forma oval cerrado por una balaustrada de estilo clásico con distintas tribunas. Además se montó una tribuna ricamente decorada[Nota 1] desde la que el ejercicio era contemplado por Carlos III, otros miembros de la familia real,[Nota 2] y la corte. El espectáculo se dividió en 4 cuadrillas:[4][5]
Este espectáculo anual en Aranjuez era admirado por viajeros, como el británico Joseph Townsend, que describió el juego de parejas de 1787:
I had the satisfaction of seeing a pageant peculiar to this country (en español, Tuve la satisfacción de ver un espectáculo propio de este país...).[6]
A principios del siglo XIX todavía se celebraban juegos de parejas en la corte española. La última vez que se celebraron fue hacia 1830.
En 2018 se recuperó el ejercicio en la plaza de Toros de Aranjuez dentro del XXV Festival de Música Antigua.[7]
El juego se desarrollaba mediante la participación de una serie de jinetes en conjuntos de dos. Los jinetes describían distintas figuras en un lugar cercado y limitado al aire libre. En ocasiones el espectáculo se realizaba al compás de composiciones musicales de aire marcial, compuestas por los compositores de corte, como Gaetano Brunetti.
Las parejas podían organizarse tanto como un espectáculo autónomo, como en el marco de otras celebraciones con motivo de nacimientos, bautismos y matrimonios de príncipes.
En el siglo XVIII y principios del siglo XIX los jinetes eran normalmente personas reales y grandes de España.