Cuevas de Sacromonte es el nombre que recibieron los depósitos subterráneos de armas de la Escuela de Comunicaciones del Ejército Nacional de Colombia.Se encuentran ubicadas en la población de Facatativá[1] y se convirtieron en el sitio de experimentación de torturas dirigido por el Batallón de Inteligencia y Contrainteligencia Charry Solano, que posteriormente pasó a llamarse Brigada XX, cuerpo especial de las Fuerzas Armadas de Colombia.[2]
En estas cuevas o cavernas fueron torturado entre otros, miembros de los grupos guerrilleros M-19 y ELN. Las FF.MM actuaron bajo el estado de sitio y el Estatuto de Seguridad en el gobierno de Julio César Turbay, pero los abusos contra los derechos humanos continuaron.[3][4][5]
Entre las víctimas conocidas que fueron torturadas y/o asesinadas en estos actos de crímenes de Estado se encuentran:
Responsables de los acontecimiento de este batallón durante los años 1978-1982: