La Malena es un yacimiento arqueológico situado en la localidad española de Azuara, provincia de Zaragoza.
Villa romana de La Malena | ||
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![]() Deméter - Ceres (s.IV dC) hallado en La Malena. | ||
Ubicación | ||
Área protegida | BIC (BOE, 15 de mayo de 1992)[1] | |
País |
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División |
![]() | |
Subdivisión |
![]() Campo de Belchite | |
Municipio | Azuara | |
Coordenadas | 41°15′23″N 0°50′47″O / 41.256444444444, -0.84647222222222 | |
Historia | ||
Tipo | Yacimiento arqueológico | |
Uso original | Villa romana | |
Época | Imperio romano | |
Gestión | ||
Propietario | DGA | |
Acceso público | Restringido | |
Dimensiones del sitio | ||
Área | Aprox. 2.500 m² | |
Otros datos | ||
Provincia | Tarraconense | |
Conventus | Caesaraugustanus | |
Mapa de localización | ||
Los restos de La Malena corresponden a una villa romana habitada entre los siglos I y V de nuestra era y destacan los más de 1000 m² de mosaicos descubiertos.
El yacimiento de La Malena, declarado Bien de Interés Cultural bajo la categoría de Zona de Interés Arqueológico, fue descubierto en 1988 y fue excavado y estudiado hasta 1992.
Los resultados arqueológicos determinaron la existencia de una villa romana del siglo IV que presentaba en la mayoría de sus estancias mosaicos y mosaicos parietales, pavimentos de tierra y pavimentos de mortero. Las excavaciones también descubrieron restos escultóricos, restos del ajuar doméstico de la villa, tanto en cerámica como en vidrio, y diversos objetos metálicos, como anillos de bronce, fragmentos de pulseras de cobre, fíbulas, un cuchillo y algunas monedas de los siglos III al V.
Pertenece al tipo de las denominadas villas romanas 'de peristilo', modelo muy extendido en el valle del Ebro y en la Meseta. Tiene planta cuadrangular de aproximadamente 50 metros de lado. La 'pars urbana' o zona noble que ocupaban los propietarios se desarrolla en torno a un gran patio central dotado con un estanque y rodeado por corredores, que abrían a éste mediante un pórtico con columnas.[2]
Desde el inicio se determinó la importancia del yacimiento por sus mosaicos de teselas y, en concreto, por el mosaico de las bodas de Cadmo y Harmonía, considerado una obra cumbre de la musivaria romana en Hispania. Destacan los pavimentos de mosaico con motivos vegetales, geométricos y figurativos, construidos con teselas de marlon, caliza marmórea, cerámica y pasta vítrea. Los motivos geométricos se usan en las entradas y corredores del peristilo, y presentan círculos simples, compuestos o entrelazados, octógonos, hexágonos, cruces griegas, nudos simples, etc; los motivos vegetales aparecen en las cenefas que enmarcan emblemas y presentan coronas de laurel, flores, hojas de acanto y de hiedra, racimos de uva, etc; y los motivos figurativos se usan como emblema central del pavimento de las habitaciones principales, destacando el ya mencionado que representa las bodas de Cadmo y Harmonía.[3]
En 2016, 30 años después de su descubrimiento, la falta de inversiones y mantenimiento hacían peligrar la integridad de los mosaicos, según denunciaron públicamente vecinos de Azuara o APUDEPA (Acción Pública para la Defensa del Patrimonio Aragonés) en las Cortes de Aragón.[4][5] Para revertir esta situación y promover la divulgación de la villa se creó la Asociación de amigos de La Malena.[6][7]
Gracias a ello, en 2017 se inauguró un museo en Azuara en el antiguo edificio de la Orden de San Juan del Hospital, rehabilitado por la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ), y aprovechando materiales de un pequeño centro de interpretación de La Malena que ya existió entre 2007 y 2011 pero que tuvo que cerrar por falta de fondos.[8]
Ese mismo año la Diputación General de Aragón redactó un plan director para proteger, restaurar y musealizar el yacimiento.[9] Inicialmente se llevaron labores de limpieza de la vegetación y en 2018 se comenzó a construir una estructura protectora que simula la estructura y el volumen de la villa, dispuesta en torno a un patio, y que permitirá al visitante entender la villa y conocer los mosaicos.[10] En 2020 se amplía esta estructura y se restauran algunos de los mosaicos más destacados.[11][12]
El proyecto también contempla adecuar un espacio de servicios para acoger a los visitantes y que dará acceso al yacimiento, así como un aparcamiento de vehículos, y un área de recreo externa al recinto arqueológico en la zona más próxima al río Cámaras, debido a su atractivo natural.[13]