Los vellos terminales son más gruesos, más largos, y más oscuros, que el vello corporal.[1] Durante la pubertad, el aumento en los niveles de las hormonas andrógenas hace que el vello corporal sea reemplazado con vello terminal en ciertas partes del cuerpo humano.[2] Estas partes tienen distintos niveles de sensibilidad a las hormonas andrógenas (principalmente los derivados de la testosterona).[3]
El área púbica es particularmente sensible a tales hormonas, pero también lo son las axilas las cuales desarrollan vello axilar.[4] El vello púbico y el vello axilar se desarrolla tanto en hombres como mujeres. A medida que el vello crece se considera una característica sexual secundaria, sin embargo los hombres desarrollan vello terminal en más áreas.[5] Esto incluye el vello facial, vello pectoral, vello abdominal, así como vello en las piernas, brazos y en los pies.[6] Por otro lado, las mujeres tienden a tener menos vello corporal.[7]