Tales from the Hood es una película de antología de 1995 dirigida por Rusty Cundieff y producida ejecutivamente por Spike Lee.[1] El filme presenta cuatro historias de terror basadas en conceptos problemáticos que afectan a la comunidad afroamericana como la corrupción policial, el abuso doméstico, el racismo institucional y la violencia de las pandillas; todo ello presentado dentro de una historia marco de tres traficantes de drogas que encuentran a un excéntrico director de funeraria.[2][3]
Tales from the Hood | ||
---|---|---|
Ficha técnica | ||
Dirección | Rusty Cundieff | |
Producción | Spike Lee | |
Guion | Rusty Cundieff | |
Música | Christopher Young | |
Fotografía | Anthony B. Richmond | |
Protagonistas |
| |
Ver todos los créditos (IMDb) | ||
Datos y cifras | ||
País | Estados Unidos | |
Año | 1995 | |
Género | Terror, hood film y drama | |
Duración | 98 minutos | |
Idioma(s) | Inglés | |
Compañías | ||
Productora |
| |
Distribución |
| |
Ficha en IMDb | ||
La película recibió críticas mixtas tras su estreno, pero desde entonces ha ganado seguidores de culto.
La película muestra cuatro historias diferentes en las que se aborda temas que aquejan a la comunidad negra, que van desde el racismo institucional hasta la violencia entre pandillas: un joven policia negro que ve como sus dos colegas blancos detienen a quien resulta ser un activista por los derechos civiles emprendiendo una cruzada contra la corrupción policial; un niño que es atormentado por «un monstruo» que le deja moretones, el cual más tarde se revela que estaba refiriéndose a su abusivo padrastro; un senador exmiembro del Ku Klux Klan y aspirante ser gobernador que establece su oficina en una antigua plantación de esclavos que está embrujada por muñecos animados por las almas torturadas; y un gángster condenado a cadena perpetua conociendo a un recluso supremacista blanco, quien no era más que un peón de las autoridades, sometiendo al gángster a un proceso de tortura para hacerle comprender las consecuencias de sus actos.
Dichas historias se ven intervenidas por escenas de encuadre que involucran a Mr. Simms en su funeraria, en la que asisten un trío de traficantes de drogas llamados Stack, Ball y Bulldog. Ellos ayudan a Simms a buscar la droga que necesitan por todo el edificio.