El Presidio Menor de Melilla fue uno de los presidios españoles en África.
Ya desde 1498 figura la existencia de una presidio en Melilla.[1] Melilla y los peñones de Alhucemas y Vélez de la Gomera eran llamados los "presidios menores".[2]
En el siglo XIX hubo varias sublevaciones de presos. En 1813, durante la Guerra de la Independencia, el preso Ramón Jiménez Ortiz llevó a cabo una conspiración para entregar la ciudad a los franceses, por lo que se le condenó a muerte.[3] En 1830 hubo una conspiración para asesinar al gobernador y a los principales de la guarnición, en la que participaron los presos José Ros y Blau, el exbrigadier Pascual de Zayas, Francisco Lloret Gómez, Manuel del Castillo, Manuel Delestrade, Mariano Taver, José Molas, Salvador Conde, José Jiménez y Juan Manuel Arenas. Estos fueron llevados a Granada, donde les fueron impuestas diversas penas por el capitán general y fueron trasladados a diversas prisiones. En 1840 el preso Cesáreo Cardenal dirigió una sublevación y fue condenado a muerte.[4] También hubo fugas de presos, que se iban a Marruecos y se hacían musulmanes.[5]
Tras Ordenanza General de los Presidios de 1834, realizada por el político Javier de Burgos, Ceuta, Melilla y los peñones de Alhucemas y Vélez de la Gomera tuvieron prisiones para los presos condenados a más de ocho años.[5]
El número de presos en Ceuta y Melilla fue reducido por el Real Decreto del 22 de octubre de 1906.[6] Por Real Decreto del 6 de mayo de 1907 se cerraron los presidios de Melilla, Alhucemas y Vélez de la Gomera y los presos fueron enviados a la península.[6] La prisión de Ceuta se cerró en 1911.[7]
Su cuartel, con los dormitorios de los presos estaba en la zona norte de la Plaza de Armas desde el siglo XVIII, que fue reconstruido en 1734 y terminado de derribar en 1979, si bien se usaron otros edificios ante la gran cantidad de presos políticos en el Sexenio Absolutista, como el Convento de los Frailes Menores Capuchinos y el Fuerte de Victoria Grande.[8][1]