Pedro Manrique de Padilla (Ezcaray, ¿?-Alcalá de Henares, 22 de enero de 1577 [1]) fue un noble y eclesiástico español del siglo XVI.
Era hijo de Antonio Manrique de Lara, señor de Valdezcaray; y su esposa Luisa de Padilla Enríquez, hija del adelantado mayor de Castilla. Tuvo otros hermanos y hermanas:[2][3]
Pedro seguiría la carrera eclesiástica, estudiando en la Universidad de Alcalá. Sería en esta ciudad donde conocería a la Compañía de Jesús, haciendo a sus 15 años entonces voto de entrar en ella. Posteriormente, la Sede Apostólica le dispensaría de este voto.[5]
Llegaría a ser a ser nombrado canónigo (canonjía 29. ª) de la catedral de Toledo en 1560.[6] [7]Posteriormente , en 1567, llegaría a ser obrero mayor de ese templo, primado de España. Sucedió como obrero mayor a su tío García Manrique de Lara.[8] También fue administrador del Hospital de Tavera en esa ciudad
En 1564 fue encargado por el cabildo toledano para viajar a París, ya que Felipe II había conseguido de Carlos IX de Francia que la abadía de Saint-Denis enviara a Toledo los restos de San Eugenio, primer arzobispo de Toledo. Volvió a Toledo junto con los restos en 1565.[9][10] Mandó realizar una bóveda pintada en su casa en honor del santo y como conmemoración del regreso de sus restos.[11]
A principios de 1572 recibió en Toledo a su sobrino Antonio, hijo de su fallecido hermano Juan. Antonio había sido enviado por su madre Luisa de Padilla a Toledo ya que el joven deseaba hacerse jesuita. Ya en la ciudad, Antonio escapó de casa de su tío para llegar a la casa profesa donde intentó ingresar en la Compañía de Jesús. Finalmente se convenció al joven que volviera a Valladolid.[12][13]En esa misma época ayudó a Teresa de Jesús a fundar en Toledo un convento de su reforma, frente a las reticencias de Gómez Tello, gobernador del arzobispado de Toledo.[14]
En la década de 1570 ingresó en la Compañía de Jesús, cumpliendo con el voto realizado a sus 15 años.[15]
Murió en Alcalá de Henares el 22 de enero de 1577.[15][16]