Por moluscos introducidos en Venezuela entiéndase todos aquellos moluscos invasores, o que no forman parte de la fauna natural de Venezuela, son aquellos que han llegado al territorio venezolano por acción del hombre (intencionada o no) y los cuales han logrado aclimatarse en el ambiente natural.
Durante mucho tiempo no se prestó atención a estos organismos que colonizaban el ambiente natural, algunos de ellos llegando a ser tan abundantes y comunes que se consideran por muchos sectores de la población como parte de la fauna nacional. Ejemplos de ello son los casos de Subulina octona gastrópodo pulmonado de la familia Subulinidae y el mejillón Perna perna.[1][2][3] o el caso de la babosa y sietecueros de las familias Arionidae y Limacidae las cuales fueron introducidas a finales del siglo XIX.[4][1]
Un segundo grupo de estos moluscos introducidos en el ambiente natural lo constituyen los moluscos de interés médico sanitario como pueden ser los casos de caracoles de la familia Thiaridae y Achatinidae. En esta última familia tenemos el caso de Lissachatina fulica el cual se ha convertido en una verdadera plaga agrícola además de que constituye un posible intermediario de peligrosos parásitos humanos del género Angistrongilus.[5][2][6]
Un tercer grupo lo constituyen las especies que llegan de polizones en el agua de lastre de los barcos y los cuales al descargar su aguas en las costas se convierten en agentes dispersantes de moluscos, un ejemplo de este tipo de dispersión lo constituye Babylonia aerolata.[7][3]
Esta es una lista de 52 especies de moluscos que se han introducido en Venezuela, según han sido reportados en la literatura especializada.
Modulidae
Turbinellidae
Umbraculidae
Bradybaenidae
Ferussaciidae
Limacidae
Streptaxidae
Subulinidae
Donacidae
Mactridae
Placunidae
Pteriidae
Telinidae
Thraciidae