En la mitología griega las melisas (en griego antiguo: μέλισσαι, mélissai) son un tipo de ninfas de quienes se cree que las abejas recibieron su nombre.[1] Para algunos Melisa, en singular, era una mujer que descubrió y enseñó el uso de la miel.[2] Las abejas parecen haber sido el símbolo de las ninfas, por lo que a veces se las llama melisas, y a veces se dice que se transformaron en abejas.[1][3] Ciertas ninfas con forma de abejas guiaron a los colonos que fueron a Éfeso.[4] Unas abejas sagradas fueron nodrizas de Zeus en una caverna de Creta.[5] De entre las melias del Dicte una de ellas era Panácride, una abeja que le proporcionaba miel dulce al infante Zeus.[6]