Martiniano (en latín: Martinianus, m. 325) fue un oficial y luego coemperador de Licinio (r. 308-324) desde julio hasta el 18 de septiembre de 324. Inicialmente ejerció el cargo de magister officiorum en la corte de su futuro coemperador, y posteriormente fue elevado a augusto a causa del desastre de la batalla de Adrianópolis de 324. Después de su nombramiento, fue enviado con una fuerza militar a Lámpsaco para evitar que Constantino I (r. 306-337) cruzara la ciudad y llegara a Asia Menor. Después de la batalla del Helesponto, Licinio lo llamó para ayudar a fortalecer las filas de su ejército. A causa de la decisiva victoria de Constantino en la batalla de Crisópolis, ambos fueron capturados y Martininiano terminó siendo ejecutado en Capadocia a finales de 324.
Martiniano | ||
---|---|---|
![]() Follis con efigie de Martiniano, con la leyenda «IM CS MAR MARTINIANUS PF AVG» | ||
| ||
Augusto del Imperio romano de Occidente | ||
Julio de 324-septiembre 324 | ||
Predecesor | Constantino I | |
Sucesor | Constantino I | |
| ||
Información personal | ||
Nacimiento | Siglo III | |
Fallecimiento |
325 Capadocia | |
Causa de muerte | Pena de muerte | |
Religión | Paganismo | |
Información profesional | ||
Ocupación | Gobernante | |
El nombre completo de Martiniano solo aparece en forma abreviada en sus monedas. La abreviación «Mar» suele ser interpretada como «Marcius».[1] La palabra «S» en algunas de sus monedas ha sido interpretada como «Sextus»,[2] aunque es posible que esta sea parte de la abreviación de Caesar.[3]
No se tiene constancia sobre los orígenes de Martiniano. Su primera aparición data de 324, cuando ejercía el cargo magister officiorum en la corte del emperador Licinio (r. 308-324).[4] En esos tiempos, Constantino I (r. 306-337) y el emperador anteriormente nombrado se encontraban en guerra. Después de la derrota en la batalla de Adrianópolis el 3 de julio, Licinio decidió destituir a Constantino —solo de palabra—, por lo que elevó a Martiniano al puesto de augusto de Occidente,[5] tal y como había hecho al nombrar a Valerio Valente en su primera guerra contra Constantino;[6] en esa época, el augusto de Oriente carecía de ayuda de un comandante leal, algo que Constantino poseía gracias a su hijo mayor Crispo.[7] Las fuentes afirman que Martiniano fue nombrado césar (emperador menor), pero la historiografía concuerda que fue designado augusto (emperador mayor), tal y como indican las monedas acuñadas con su nombre.[8][9][10]
Licinio envió al augusto al frente de un ejército, que incluía tropas auxiliares visigodas,[11] a Lámpsaco, en la costa asiática del Helesponto, con la intención de evitar que Constantino utilizara su armada para cruzar desde Tracia hasta Misia y Bitinia en Asia Menor. Una batalla naval en el Helesponto, con Crispo como comandante enemigo, ocasionó la destrucción de la marina de Licinio.[12] Después de esta derrota, este se retiró con sus tropas de Bizancio, que estaba sitiada por Constantino, a Calcedonia, situada en la costa asiática del Bósforo.[13] Constantino atravesó el Bósforo hacia Asia Menor con la ayuda de una flotilla compuesta por buques de transporte ligeros independiente a su armada principal para evitar a las fuerzas de Martiniano.[14]
Licinio convocó a Martiniano para reforzar a su ejército principal,[15][16] pero no es seguro si llegó al primero antes de la batalla de Crisópolis del 18 de septiembre de 324, cuando fue derrotado por última vez.[9][7] Debido a la intervención de Flavia Julia Constancia, hermana de Constantino y esposa de Licinio, lograron salvarse, aunque ambos fueron apresados, este último en Salónica y Martiniano en Capadocia.[17] Al final, pese a las garantías dadas por Constantino, Martiniano fue ejecutado a finales de 324,[18] mientras que Licinio fue ajusticiado en la primavera de 325, acusado de estar reclutando tropas para rebelarse contra Constantino y su hijo, Licinio II, también fue ejecutado por orden imperial.[19]
Apenas se conocen monedas sobre Martiniano. Existen falsificaciones y algunas parecen haber sido producidas por el mismo falsificador que acuñó las monedas de Valerio Valente.[20] Las pocas monedas originales fueron acuñadas en Nicomedia y en Cícico y las irregularidades que muestran las acuñaciones de los anversos de estas indican la prisa con la que se trabajó a la hora de hacerlas, problema que también comparten los ejemplares de sus colegas orientales.[21][22]
Predecesor: Licinio |
Emperador romano 324 con Licinio |
Sucesor: Constantino I |