Las llamadas armas malolientes o «malodorantes» (en inglés malodorant, antónimo de deodorant o desodorante), son compuestos químicos extremadamente malolientes usados como arma aturdidora[1] para incapacitar temporalmente a sus víctimas.[2] Los ataques con armas malolientes afectan a los nervios olfativos y a los lagrimales. En ausencia de complicaciones, se trata de armas no letales[1] que pueden violar las convenciones contra armas químicas.[3][4][5]
Las armas malolientes se componen generalmente de dos ingredientes al menos: la sustancia fétida en sí y un portador/reforzador, como puede ser el agua, lanzada a presión por medio de un cañón.[3][1]