El Hospital Friern (anteriormente Asilo Lunático de Colney Hatch) fue el hospital psiquiátrico más importante del Reino Unido. Localizado en Friern Barnet, al norte de Londres, funcionó de 1851 a 1993.[1]
Actualmente sus instalaciones son viviendas residenciales de lujo y sus extensos terrenos del siglo XIX hoy se convirtieron en el municipio de Barnet. En su momento de mayor apogeo albergó a 2.500 pacientes mentales y tenía el pasillo más largo del país: un visitante tardaría más de dos horas en recorrerlo.[2]
La construcción fue encargada por el Tribunal de Magistrados de Middlesex, como reemplazo del Asilo de Middlesex y se eligió al arquitecto Samuel Daukes; quien lo diseñó sobre un estilo italiano y se basó en el consejo de John Conolly, el superintendente del anterior manicomio.[3]
La construcción inició en 1849 con un presupuesto de £ 150.000, se completó en noviembre de 1850 a un costo final de £ 300.000 y es así el hospital psiquiátrico más caro de la historia. Se inauguró el 17 de julio de 1851 por el príncipe consorte Alberto y William Hood fue su primer director.[4][5]
En la época victoriana la finca de 30 hectáreas tenía su propio suministro de agua, cementerio, planta de gas, cervecería y un aviario donde se criaban canarios.[6] El asilo permitió el desarrollo de la zona, compuesta por las aldeas de Colney Hatch y Whetstone, construyéndose la estación de tren New Southgate.[7]
En 1857 se construyeron ampliaciones para albergar un total de 2.000 pacientes y para entonces se evidenciaron graves defectos de construcción. En una sala, las paredes y las vigas se separaron y el techo arqueado cedió, mientras que en otra se derrumbó parte del techo y se descubrió que el mismo era insuficiente y que los cimientos eran inseguros, lo que requirió obras de refuerzo en 1858.[6]
De 1862 a 1890 el director fue William Wyatt y bajo él se aplicaron los tratamientos más brutales de la época.[8][9] Para los años 1870 las condiciones de los reclusos se habían vuelto muy malas y aun así se realizaron ampliaciones. Por todo esto, en 1889 el control del asilo fue transferido al recién formado Consejo del Condado de Londres.[2]
En 1903 un edificio temporal de madera y hierro corrugado, construido en 1896, fue destruido por un incendio y se cobró la vida de 52 mujeres.[2][10] Para 1927 el personal médico era de 674 y trataban a 2.500 pacientes.
En 1930, adecuándose a una nueva ley de salud mental, el asilo pasó a llamarse «Hospital Mental de Colney Hatch». En 1937 se construyó una nueva residencia de enfermeras y la institución se volvió a renombrar, como «Hospital Mental Friern».[6]
Durante la Segunda Guerra Mundial se requisaron doce salas para internar a 900 eventuales víctimas civiles y el Hospital de San Bartolomé aportó el personal médico. Los pacientes mentales desplazados se redistribuyeron a otras salas y al Hospital Bexley de Kent.
En 1941 la zona fue bombardeada por la Luftwaffe, destruyeron cinco edificios, murieron 36 pacientes y cuatro enfermeras. Hasta 1944 el hospital contó 2.557 camas para enfermos mentales y 746 camas para civiles.[6]
En 1948 el hospital pasó a formar parte del recién formado Servicio Nacional de Salud y supuso una evidente mejora del tratamiento humano.
En 1958 construyó una moderna unidad de 145 camas y en 1959 renombró a la institución finalmente: Hospital Friern.[2] La nueva denominación obedeció a una nueva ley de salud, que ordenaba eliminar la palabra «mental» de los hospitales.
En 1963 se abrió una cafetería, los pacientes podían ganar semanalmente hasta 80 peniques o tabaco; trabajando en las salas, la cocina y la lavandería.[6] En 1971 se instaló una estación de radio e inició un programa, como un esfuerzo para mejor calidad de vida de los internos.[11]
En julio de 1965 Lord Strabolgi, hablando en la Cámara de los Lores, criticó al hospital por la cantidad de pacientes que estaban allí simplemente porque eran ancianos y en 1966 un comité de investigación encontró que el 36% de ellos no necesitaban atención psiquiátrica. El informe destacaba la falta de alojamiento alternativo para los ancianos y la falta de trabajadores sociales, lo que en realidad significaba que no había ningún otro lugar para alojar a los pacientes ancianos perturbados.[6][12]
Para 1973 el número de pacientes se había reducido a 1.500, en 1979 eran solo 1.023 y por esta razón en 1989 se decidió que el hospital debía cerrar. La clausura se produjo en 1993 y los pacientes se reintegraron a la comunidad.
En 1995 el edificio y los pocos terrenos se vendieron, las instalaciones fueron remodeladas y se convirtieron en pisos de lujo, llamados Princess Park Manor. Las propiedades fueron adquiridas por celebridades, muchos futbolistas profesionales, y en los años 2010 los miembros de la banda One Direction se mudaron allí.[13]
En noviembre de 1888 la policía internó al barbero Aaron Kosminski, sospechoso de los asesinatos de Whitechapel. Fue informado como «enfermo crónico inofensivo», al pasar el tiempo perdió totalmente la razón y murió en 1919.
El mismo mes, la familia Kaminsky (y se cree la comunidad judía) internó a David Cohen; alias de Nathan Kaminsky; un zapatero enfermo de sífilis avanzada. Se informó sobre él como «peligrosamente agresivo, comportamiento misógino, de tendencias violentas y destructivas», atacaba al personal y fue sometido a brutales tratamientos: confinamiento solitario y usar una camisa de fuerza, muriendo en octubre de 1889. Actualmente Cohen/Kaminsky es señalado como el sospechoso más probable de ser Jack el Destripador.
Otros pacientes incluyen a:
La novela El Código de los Woosters, publicada en 1938, de P. G. Wodehouse. Cuando los protagonistas Jeeves y Wooster están discutiendo su última situación, Jeeves sugiere que un personaje es excéntrico, a lo que Wooster responde: «¿Excéntrico? Podría entrar directamente a Colney Hatch sin hacer preguntas».[16]
La novela infantil El sobrino del mago, publicada en 1955, de C. S. Lewis. Cuando Jadis se proclama emperatriz y exige que los residentes de Londres se inclinen ante ella, ellos responda burlonamente diciendo: «¡Tres hurras por la emperatriz de Colney Hatch!».[17]
La película Britannia Hospital, estrenada en 1982, de la directora Lindsay Anderson. Utilizó los edificios del hospital y las puertas de entrada para las escenas exteriores.[18]
La novela Umbrella, publicada en 2012, de Will Self. Se desarrolla principalmente en el hospital.[19]
La novela El bebé de oro puro, publicada en 2013, de Margaret Drabble. El hospital aparece en ella.[20]
La película Stonehearst Asylum, estrenada en 2014, del director Brad Anderson. La historia tiene lugar en el hospital, aunque se cambia su nombre a Stonehearst por la obra original de Edgar Allan Poe.
La película Jack el Destripador, estrenada en 2016, del director Sebastian Niemann. Muestra a Aaron Kosminski internado en el asilo y la protogonista Anna Kosminski (interpretada por Sonja Gerhardt) lo visita regularmente.