Una corte suprema o tribunal supremo (también, por antonomasia, el Supremo)[1] es aquel órgano que ejerce las funciones de un tribunal de última instancia del poder judicial, cuyas decisiones no pueden ser impugnadas, o las de un tribunal de casación. Sin embargo, algunos sistemas no utilizan el término para designar a sus tribunales de más alta jerarquía y otros lo utilizan para nombrar a tribunales que no son superiores, como el descrito.[¿cuál?]
Algunos países siguen el modelo estadounidense de una corte suprema que interpreta la Constitución y poseen el control de constitucionalidad de las leyes y otras normas de rango infralegal, mientras que otros siguen el modelo austríaco de tribunal constitucional separado. De todos modos, no es inusual, como en ciertos Estados iberoamericanos, que el control de la constitucionalidad se encuentre compartido entre el tribunal constitucional y la corte suprema.[2]