Una bestorre es una torre defensiva de planta semicircular o rectangular, con el frente interior (gola) abierto, presente en numerosos recintos amurallados[1][2] adosada siempre al lienzo de muralla.[3] Por otra parte, la bestorre se puede referir también a las torretas, a veces similares a garitas, construidas sobre una muralla para facilitar las condiciones de vigilancia.
Este tipo de disposición defensiva se empleaba en murallas urbanas donde el atacante, sorteada la muralla, no encuentra protección frente a ataques desde el interior. Además tal circunstancia suponía un ahorro de costes y de tiempos en su construcción.[4]
Podía ser semicircular (ejemplos en Loarre, Castillo de San Miguel de la Vall) o cuadrangular (ejemplos en el Cerco de Artajona, Castillo de Castellví o Pals).
Hay varios casos de recintos donde están presentes ambos tipos: en Mansilla de las Mulas (León), en Toledo, así como en el Castillo de Claramunt (Noya)[5] o en el Castillo de Montsoriu (La Selva), etc.