The Last of Us Part II es un videojuego de acción y aventura de 2020 desarrollado por Naughty Dog y publicado por Sony Interactive Entertainment. La historia se centra en dos protagonistas: Ellie, quien emprende un viaje de venganza tras sufrir una gran tragedia, y Abby Anderson, una soldado que se involucra en un conflicto entre su milicia y un culto. La alternancia entre personajes jugables fue un elemento clave durante la producción del juego, inspirado en un recurso similar del título original, The Last of Us (2013).
Parte de la trama aborda la relación de Ellie con Joel, protagonista del primer juego, quien le ocultó la verdad. A lo largo de su recorrido, Ellie es acompañada por varios personajes, como su novia Dina, su amigo Jesse y Tommy, el hermano de Joel. Abby, por su parte, forma parte del Frente de Liberación de Washington, liderado por Isaac, y en el que también están Owen, su exnovio, y su amigo Manny. Durante su viaje, Abby conoce y protege a Yara y Lev, dos hermanos que pertenecen al culto enemigo conocido como los Serafitas.
El director creativo Neil Druckmann escribió la historia junto con Halley Gross. Las actuaciones fueron filmadas mediante captura de movimiento, que combina el registro de voz y movimientos corporales en simultáneo. Los actores contaron con libertad para improvisar o aportar ideas durante el proceso. Uno de los objetivos del equipo de guion fue crear personajes complejos, en especial Ellie, y explorar las vulnerabilidades de Abby para generar empatía en el jugador. Los personajes recibieron críticas diversas, aunque las actuaciones fueron ampliamente elogiadas.
Naughty Dog grabó las interpretaciones de los actores de The Last of Us Part II en un estudio ubicado en Playa Vista (Los Ángeles) utilizando captura de movimientos, un sistema que registra el movimiento corporal y la voz de forma simultánea.[1] Los actores vistieron trajes especiales y llevaron cámaras montadas en la cabeza para capturar sus movimientos faciales y oculares;[2] se grabó entre 2017 y abril de 2019.[3][1] Los intérpretes contaron con libertad para improvisar o proponer ideas; en ocasiones, repitieron una misma escena hasta «20 o 30 veces si era necesario».[4] La coguionista Halley Gross explicó que el equipo de guion buscó «crear los personajes más complejos que se hayan visto en los videojuegos»[5] y explorar el comportamiento multifacético de Ellie, mostrando tanto su fortaleza como sus inseguridades,[6] y también señaló que el objetivo narrativo era transmitir que «no hay héroes ni villanos».[7] Neil Druckmann, director y coguionista, destacó que los tres personajes jugables —Joel en el primer juego, y Ellie y Abby en la secuela— se reflejan entre sí porque todos cargan con traumas y luchan por «silenciar sus demonios internos».[8]: 1:26:59
El equipo decidió cambiar el personaje jugable de Ellie a Abby, inspirado en el cambio de Joel a Ellie en el primer juego, pero con mayor énfasis debido al enfoque centrado en la empatía.[9] Druckmann observó que los jugadores modificaron su comportamiento cuando tomaron el control de Ellie en el primer juego y quiso provocar una transformación similar al ponerlos en el papel de Abby.[10] También se inspiró en el cambio de protagonista en Metal Gear Solid 2: Sons of Liberty (2001), que su desarrolladora ocultó en su campaña de mercadotecnia.[8]: 1:36:19 Al principio, los guionistas probaron a intercalar las secciones de Ellie y Abby pero finalmente optaron por extender cada segmento para profundizar en sus historias.[11]: 4:05 Druckmann consideró que la venganza de Ellie reflejaba la de Abby, quien ya había logrado vengar la muerte de su padre. Las primeras pruebas del enfrentamiento final generó confusión sobre por qué Ellie decidía perdonar a Abby; tras recibir sugerencias del equipo editorial añadieron un breve recuerdo de Joel tocando la guitarra lo cual, según Druckmann, sirvió como una motivación emocional equilibrada entre lo implícito y lo explícito. Durante más de la mitad de la producción, el guion mostraba a Ellie matando a Abby[9] y volviendo a la granja, donde un familiar de una de sus víctimas la torturaba pero decidía perdonarla. Aunque Druckmann creyó que ese final tenía coherencia temática, comprendió que sacrificaba la autenticidad emocional de los personajes;[12]: 31:43 después de debatir sobre la historia de Yara y Lev, concluyó que Ellie aún conservaba algo de bondad;[9] buscó que el jugador apoyara tanto a Ellie como a Abby en el enfrentamiento final y comprendiera la futilidad del ciclo de violencia.[13]
Ellie (Ashley Johnson) es una protagonista jugable de The Last of Us Part II. Dos años después de los eventos del primer juego, regresó al hospital de las Luciérnagas y obligó a Joel a decirle la verdad. La trama principal del videojuego se sitúa dos años más tarde, cuando Ellie y Joel han establecido una vida en Jackson, aunque su relación sigue siendo tensa. Cuando Joel y Tommy desaparecen, Ellie y su novia Dina salen del pueblo para buscarlos. Ellie llega al campamento del Frente de Liberación de Washington (WLF) y presencia cómo Abby Anderson asesina brutalmente a Joel, lo que la lleva a jurar venganza. Junto con Dina, viaja hasta la base del WLF en Seattle, donde también ha ido Tommy. Tras escapar de una emboscada, ambas se refugian en un teatro. Allí, Ellie revela a Dina su inmunidad al hongo Cordyceps y descubre que Dina está embarazada. Al día siguiente, debido al malestar de Dina, Ellie continúa sola en busca de Tommy. En el camino se reencuentra con Jesse, exnovio de Dina, quien las había seguido hasta Seattle. Al enfrentarse a los Serafitas —un culto que combate al WLF por el control de la ciudad— Ellie logra rastrear a Nora Harris, miembro del WLF, hasta un hospital, donde la tortura para obtener información.
Después de que Jesse parta a buscar a Tommy, Ellie localiza el escondite de Abby en un acuario. Allí mata a Owen Moore y a su novia Mel, quien estaba embarazada. De vuelta en el teatro, Abby embosca al grupo, asesina a Jesse y hiere a Tommy. Aunque derrota a Ellie y Dina, Abby decide perdonarlas y las obliga a marcharse. Tiempo después, Ellie y Dina viven en una granja criando al hijo de Dina, pero Ellie continúa sufriendo de trastorno por estrés postraumático (TEPT). Cuando Tommy llega con información sobre el paradero de Abby, Ellie decide ir a Santa Bárbara para matarla, a pesar de las súplicas de Dina. En el viaje, cae en una trampa y resulta herida, pero logra escapar y rescata a Abby y a Lev, quienes habían sido torturados durante semanas. Amenaza con matar a Lev para forzar a Abby a luchar. Durante el combate, Ellie logra someterla, aunque pierde dos dedos, pero finalmente la perdona. Al regresar a la granja, encuentra la casa vacía. Toca la guitarra de Joel, recuerda su promesa de perdonarlo, y se marcha.
Para su interpretación, Johnson aplicó las lecciones que aprendió al trabajar con Troy Baker en el primer juego.[14] Colaboró con Druckmann en la investigación sobre el TPEP, basándose en su experiencia personal con la ansiedad.[15] El interés de Ellie por la astronomía fue inspirado por Johnson, mientras que su fascinación por los cómics se inspiró en la infancia de Druckmann.[10] Gross consideró que el verdadero motor de Ellie al perseguir a Abby era su necesidad de superar el trauma, más que el deseo de venganza;[9] al haber padecido dos veces de TPEP, asumió la responsabilidad de representar el tema con veracidad.[2] Los guionistas buscaron deconstruir la percepción de la violencia en Ellie y Joel: mientras Joel actúa con indiferencia y pragmatismo, Ellie perpetúa una «cultura del honor», atando la violencia a su ego.[9] Algunos miembros del equipo compararon la obsesión de Ellie con Abby con una adicción, y vieron la marcha de Dina como resultado de su pensamiento de que esa obsesión no tendría fin.[8]: 1:10:55
Johnson recibió aclamación por su actuación[16][17][18][19][20][21] y obtuvo varias nominaciones a premios por su trabajo.[22][23][24][25][26]
Abigail «Abby» Anderson (Laura Bailey) es una protagonista jugable de The Last of Us Part II. Su padre, Jerry Anderson, fue el cirujano de las Luciérnagas que Joel mató para salvar a Ellie al final del primer juego; cuatro años después, con cerca de veinte años,[27]: 15 Abby localizó a Joel y lo asesinó a golpes en represalia. Tiempo después, de regreso en Seattle, Abby descubrió que su exnovio Owen había desaparecido durante una misión para investigar a los Serafitas. El líder del WLF, Isaac Dixon, sospechaba que Owen había desertado; por ello, organizó una ofensiva contra el asentamiento de los Serafitas en una isla cercana. Durante su búsqueda, Abby fue capturada y presenció cómo los Serafitas fracturaban el brazo de Yara, una joven desertora; fue rescatada por Lev, hermano menor de Yara, con quien escapó y se refugió en un acuario, donde también se encontraba Owen. Él le reveló su intención de viajar a Santa Bárbara, lugar donde supuestamente las Luciérnagas estaban reorganizándose. Ante la necesidad de amputar el brazo de Yara, Abby y Lev se infiltraron en un hospital repleto de infectados para obtener suministros médicos. Lev huyó hacia el asentamiento Serafita con la intención de convencer a su madre de abandonar el culto; Abby y Yara lo siguieron y, en medio de un ataque liderado por Tommy, lograron reunirse con él.
En el asentamiento, descubrieron que Lev había matado a su madre en defensa propia; durante la incursión del WLF, Yara asesinó a Isaac y se sacrificó para que Abby y Lev pudieran escapar. Al regresar al acuario, Abby encontró los cuerpos de Owen y Mel, embarazada, junto con un mapa que revelaba la ubicación del escondite de Ellie en un teatro. Allí, Abby mató a Jesse, hirió a Tommy y derrotó a Ellie y Dina; al enterarse de que Dina también estaba embarazada, Abby decidió perdonarlas por insistencia de Lev, y las obligó a marcharse. Un tiempo después, Abby y Lev llegaron a Santa Bárbara en busca de las Luciérnagas; sin embargo, fueron capturados por las Víboras, una banda esclavista que los mantuvo cautivos y los torturó durante semanas. Ellie los localizó y, tras liberarlos, amenazó con matar a Lev para obligar a Abby a pelear. Aunque Ellie logró dominarla, decidió perdonarla; Abby partió junto a Lev en dirección a la base de las Luciérnagas, ubicada en la isla Santa Catalina.[28]
Abby fue descrita como una figura de «gran presencia física», cuya complexión refleja años de entrenamiento y combate;[27]: 15 su diseño atravesó múltiples versiones con el objetivo de presentarla como una mujer «capaz, decidida y fuerte».[27]: 118 Aunque inicialmente Druckmann dudaba en elegir a Bailey por su participación frecuente en otros proyectos, su audición lo convenció gracias a la vulnerabilidad que transmitió en su interpretación.[8]: 1:32:20 Bailey entrenó físicamente para el papel;[29]: 24:33 además, dio a luz a su primer hijo durante el desarrollo del juego[29]: 13:30 y se preparó investigando testimonios de personas que vivieron conflictos bélicos, para entender mejor los mecanismos psicológicos del personaje.[29]: 33:39 El rostro de Abby se basó en la artista de efectos visuales Jocelyn Mettler, quien trabajó en Naughty Dog; su cuerpo, en la atleta Colleen Fotsch.[30] La narrativa de Abby y sus capítulos jugables generaron controversia entre algunos jugadores;[31] Bailey incluso fue víctima de amenazas de muerte en internet.[32][33] No obstante, numerosos críticos consideraron que la recepción negativa hacia el personaje era injusta;[34] además, señalaron que las críticas hacia su complexión física evidenciaban la falta de diversidad corporal en los videojuegos.[35][36] La actuación de Bailey fue aclamada por la crítica;[37][38][39][40] ganó reconocimientos en los premios BAFTA,[41] premios The Game[22] y premios NAVGTR.[42]
Kaitlyn Dever interpretó a Abby en la segunda temporada de la adaptación televisiva de HBO.[43]
Joel Miller (Troy Baker) es el padre adoptivo de Ellie y el protagonista del primer juego. En el prólogo de The Last of Us Part II, le confesó a su hermano Tommy que se sientía culpable. A lo largo de la historia, varios recuerdos mostraron momentos compartidos con Ellie, como un viaje de cumpleaños a un museo, y finalmente, la revelación de la verdad cuando ella regresó al hospital. Cuatro años después de los eventos originales, Joel y Ellie construyeron una vida en Jackson; sin embargo, su relación seguía tensa debido a su mentira. Durante una patrulla, Joel y Tommy salvaron a una desconocida llamada Abby de una horda de infectados y, tras escapar, se refugiaron en un puesto de avanzada administrado por su grupo. Allí, Abby y sus acompañantes —antiguos miembros de las Luciérnagas ahora integrados al WLF, una milicia con base en Seattle— los atacaron. Ellie los alcanzó, pero no pudo hacer nada; presenció la brutal golpiza con la que Abby le quitó la vida a Joel.
Druckmann consideró que el arco narrativo de Joel cerró al final del primer juego;[44] entonces, desde etapas tempranas del desarrollo de la secuela, decidieron que su muerte debía ser un eje fundamental de la historia. Aunque al principio algunos miembros del equipo mostraron resistencia, la narrativa en expansión reforzó la necesidad de esta decisión.[45] En una versión preliminar de la escena, Joel mencionaba el nombre de su hija, Sarah; sin embargo, fue Baker quien propuso que el personaje muriera en silencio.[9] A diferencia de la muerte de Sarah —que buscaba provocar tristeza—, la muerte de Joel pretendía provocar ira.[8]: 30:52 Druckmann pensó que mostrar este momento desde la perspectiva de Ellie intensificaría esa emoción en el jugador;[8]: 1:20:44 quería que la escena se sintiera «cruda, humillante y desprovista de heroísmo».[46][13] Aunque anticipó que la decisión provocaría reacciones negativas, consideró que era esencial para contar la historia; además, creía que la posición de Naughty Dog en la industria les permitía asumir riesgos narrativos que otros estudios evitarían.[47] Al diseñar a Joel para la secuela, el equipo artístico conservó sus rasgos distintivos, pero reflejó en su apariencia el desgaste emocional y físico de los últimos cinco años.[27]: 17
Alex Avard, de GamesRadar+, destacó que Baker brilló en algunas de las mejores escenas del juego, aportando una complejidad que enriqueció tanto al personaje como a sus relaciones.[18] Evan Lewis, de Entertainment Weekly, elogió su actuación por ser profundamente conmovedora.[48] Jonathon Dornbush, de IGN, aplaudió la manera en que Baker retrató el cansancio acumulado en Joel.[19] Por su interpretación, Baker ganó el premio al mejor actor secundario en los premios NAVGTR[42] y recibió una nominación a mejor interpretación secundaria en los premios BAFTA.[41]
Tommy (Jeffrey Pierce) es el hermano de Joel y uno de los fundadores de la comunidad de Jackson. En el prólogo del juego, Joel le confesó su culpa por lo ocurrido en el hospital. Cuatro años más tarde, Abby y su grupo mataron a Joel durante una patrulla, pero decidieron perdonarle la vida a Tommy. A pesar de pedirle a Ellie que permanezca en Jackson, Tommy escapó durante la noche y viajó a Seattle para vengarse. Allí interrogó y asesinó a varios soldados del WLF, incluyendo a Nick y Manny, amigos cercanos de Abby. Cuando encontró a Abby e intentó matarla, Yara lo apuñaló y lo lanzó al océano. Luego, se reagrupó con Ellie, Dina y Jesse; sin embargo, Abby y Lev los emboscaron. Lev le disparó en la pierna y Abby en la cabeza; Tommy sobrevivió, pero quedó ciego de un ojo y empezó a cojear. Varios meses después, visitó a Ellie y Dina en su granja; les contó que María se separó de él y le entregó a Ellie información sobre el paradero de Abby. Le pidió que la mate en su lugar. Ellie se negó; entonces Tommy la reprendió y la acusó de romper su promesa de vengar a Joel. Dina discutió con él, pero Tommy la ignoró y se fue.
Pierce interpretó a Tommy como un hombre que intenta borrar su vergüenza al convencer a Ellie de que persiga a Abby. Comparó esa actitud con los bombardeos en Irak después del 11 de septiembre; reconoció que, aunque ese «no era el objetivo correcto, algunas personas encontraron alivio emocional en la represalia».[49] Describió esas acciones como una «estupidez digna de una tragedia griega», pero también como algo «profundamente humano».[49] En versiones tempranas de la escena, María visitaba a Ellie, pero el equipo la reemplazó por Tommy para obligar a Ellie a enfrentar de forma directa el impacto emocional que Abby dejó.[27]: 172 Al rediseñar a Tommy para la secuela, el equipo reflejó su envejecimiento sin perder su esencia original.[27] Por su actuación, Pierce recibió una nominación al mejor intérprete secundario en los premios BAFTA.[41]
Dina (Shannon Woodward) es la novia de Ellie. Nació en Nuevo México y tiene raíces judías; mencionó que sus antepasados sobrevivieron tanto a la Inquisición española como al Holocausto. Perdió a sus padres a temprana edad y aprendió a defenderse sola desde los 10 años.[27]: 25 [27]: 43 Al día siguiente de su primer beso con Ellie durante un baile, ambas reciebieron la tarea de patrullar juntas. Cuando una tormenta de nieve las obligó a buscar refugio, fumaron marihuana y se besaron con pasión. Jesse, el exnovio de Dina, las encontró, y entonces se separaron para buscar a Joel. Dina finalmente encontró a una Ellie golpeada llorando junto al cadáver de Joel. Decidió acompañarla a Seattle para vengarse, pero en el camino reveló su embarazo con Jesse y se quedó a descansar en un teatro. Abby las emboscó allí; derrotó a Dina y amenazó con matarla, pero Lev la convenció de perdonarle la vida. Tiempo después, Dina vivió con Ellie en una granja, donde ambas criaron a su hijo, JJ. Cuando Ellie obtuvo información sobre el paradero de Abby, Dina le rogó que no se vaya, pero decidió partir de todas formas. Al regresar, Ellie encontró la granja vacía.
Gross presentó a Woodward, con quien trabajó en Westworld (2016—2022), a Druckmann.[50] Como fanático de la serie, Druckmann habló con Woodward durante varios meses antes de ofrecerle una audición para interpretar a Dina.[51]: 35:28 Johnson recordó que el equipo había reducido las candidatas a unas cuatro actrices. Al probar con Woodward, Johnson sintió una conexión inmediata entre ambas; después de eso, la eligieron para el papel.[15] La actriz describió a Dina como una extensión de sí misma.[52] Dijo que muchas personas enfrentan el trauma con humor, y por eso improvisó chistes durante las grabaciones.[50] El diseño de Dina cambió varias veces durante el desarrollo; en versiones tempranas, llevaba patrones que el equipo descartó por ser poco prácticos para el sigilo, aunque mantuvieron un estilo que evocara la vida antes de la pandemia.[27]: 41 El rostro de Dina se basó en el de la actriz Cascina Caradonna.[53]
Druckmann decidió que Dina sería judía desde las primeras etapas del desarrollo; consideró que ella lucha con su fe: no cree en todos los pasajes de la Torá, pero su vínculo con la religión sigue siendo importante. Su nombre significa «juicio» en hebreo, y Druckmann sintió que eso reflejaba los temas del juego.[54] Narrativamente, Dina representó a la comunidad de Jackson y todo lo que Ellie puso en riesgo al buscar venganza.[11]: 26:54 Su presencia le dio a Ellie momentos de luz;[46] el equipo sintió que Dina amplificó los mejores aspectos de Ellie.[27]: 26 Gross escribió un monólogo largo para que Ellie lo dijera a Dina, en el que le confesaba su miedo a arruinar su amistad.[51]: 40:28 El sentido del humor de Dina la ayudó a sobrellevar su pasado traumático.[27]: 40
Andrew Webster, de The Verge, describió a Dina como una «contraparte carismática y sincera» frente a la personalidad obstinada de Ellie, y destacó cuánto se siente su ausencia.[55] Jonathon Dornbush, de IGN, elogió la actuación de Woodward, especialmente en los momentos más íntimos.[19] Gene Park, de The Washington Post, calificó a Dina como «revolucionaria en silencio» por cómo retrata su herencia judía.[56] Kaity Kline, de NPR, dijo que Dina fue la primera personaje judía con la que pudo identificarse en un videojuego.[57] Jillian Diamond, de Jewish News, la consideró uno de los casos más visibles de representación judía en los videojuegos.[58] Por su trabajo en el juego, Woodward recibió una nominación a la mejor actriz secundaria en los premios BAFTA.[41]
Isabela Merced interpretó a Dina en la segunda temporada de la adaptación televisiva de HBO.[59]
Jesse (Stephen Chang), es el exnovio de Dina. Lideró una patrulla al comienzo del juego y descubrió que Joel y Tommy no estaban en su puesto asignado. Tras informar a Ellie y Dina, los tres se separaron para buscarlos. Jesse terminó por encontrar a un Tommy herido, a Ellie inconsciente y a Joel muerto. Más adelante, cuando Ellie, Dina y Tommy partieron hacia Seattle para vengar a Joel, Jesse los siguió en secreto. Finalmente localizó a Ellie en un barrio residencial de Seattle y se reagrupó con ella y Dina. Aunque descubrió que Dina estaba embarazada, evitó hablar del tema con ella. Al día siguiente, Jesse salió con Ellie, pero se separaron tras enterarse del posible paradero de Tommy; mientras Jesse lo buscó, Ellie continuó tras Abby. Más tarde, Jesse y Tommy se reencontraron con Ellie en el acuario y regresaron junto a Dina. Esa noche, durante una emboscada, Jesse corrió hacia una habitación para ayudar a Tommy, pero Abby le disparó en el rostro, matándolo instantáneamente. Meses después, Dina dio a luz al hijo de Jesse, a quien llamó JJ.
Chang comentó que sintió una conexión especial con el personaje y que el equipo de desarrollo le permitió «aportar mucho de sí mismo» a su interpretación.[60] Al diseñar a Jesse, el equipo creativo buscó reflejar experiencia, lealtad y un fuerte sentido moral. Fue uno de los personajes más sencillos de conceptualizar, al representar la figura del «vaquero estadounidense fuerte y curtido».[27]: 76
Young Mazino interpretó a Jesse en la segunda temporada de la adaptación televisiva de HBO.[61]
Lev (Ian Alexander), nacido como Lily, es el hermano de Yara y un exmiembro del grupo religioso conocido como los Serafitas. Desde joven aspiraba a convertirse en soldado, siguiendo el ejemplo de su hermana. Sin embargo, fue asignado por su comunidad como futura esposa de un anciano. En un acto de afirmación de su identidad, se rapó la cabeza, adoptó el nombre de Lev e inició su transición de género. Esta decisión provocó su expulsión, junto a Yara, de la comunidad serafita. Tras rescatar a Yara de su captura por parte de los Serafitas, ambos encuentran refugio temporal con la ayuda de Abby, quien luego los conduce hasta sus aliados Owen y Mel. Owen les propone huir juntos hacia Santa Bárbara. Lev decide regresar a la isla serafita para intentar persuadir a su madre de que lo acompañe, pero se ve obligado a matarla en defensa propia. Yara se sacrifica para asegurar el escape de su hermano y Abby. A su regreso, Lev y Abby descubren que Owen y Mel han sido asesinados. Lev acompaña a Abby en la búsqueda de Ellie, aunque finalmente optan por perdonarla. Más adelante, Lev y Abby viajan a Santa Bárbara, donde logran contactar con las Luciérnagas, pero son capturados por un grupo de bandidos. Semanas después, Ellie libera a Abby, quien escapa en un bote junto a Lev. Ambos llegan a Santa Catalina, lugar en el que se encuentran los remanentes de las Luciérnagas.[28]
Inicialmente, Lev no fue concebido como un personaje transgénero.[8]: 1:39:33 La inclusión de esta idea surgió en fases posteriores del desarrollo, cuando el equipo creativo identificó su potencial para ofrecer una visión crítica sobre la violencia ejercida por ciertas formas de religión organizada.[8]: 1:39:33 Naughty Dog contó con la colaboración de empleados queer y transgéneros, así como con la asesoría de un especialista en estudios LGBTQ. Durante el proceso de castin, el equipo descubrió que ninguna agencia con la que trabajaban representaba actores transgénero. Algunos integrantes del estudio eran admiradores de la serie The OA (2016—2019), en la que actuó Alexander.[62] Aunque en ese momento no contaba con un representante, Naughty Dog se puso en contacto con el director de dicha serie Zal Batmanglij para iniciar una conexión.[63] Druckmann invitó Alexander a audicionar,[62] y este envió grabaciones realizadas por cuenta propia; trabajó en el juego durante tres años.[63]
Alexander sintió una conexión personal con el personaje, ya que experimentó sentimientos similares durante su propia transición. Criado en un entorno mormón, también enfrentó rechazo por parte de su comunidad al cortarse el cabello.[63][62] Sin embargo, destacó una diferencia significativa: mientras que Lev encuentra consuelo en su fe serafita, él optó por abandonar la religión como forma de afrontar la discriminación.[63] Consideró que el personaje se ve obligado a madurar prematuramente debido a las condiciones de su entorno.[64]: 22:17 Aunque el equipo creativo consideró inicialmente omitir el uso del nombre de nacimiento de Lev, optaron por mantenerlo para ilustrar la transfobia inherente al grupo serafita, en contraste con la aceptación brindada por Abby y Yara.[8]: 1:39:33 Para asegurar una representación fiel de las actitudes religiosas, se contrató a un consultor experto en religiones.[13] Druckmann describió a Lev como uno de los personajes más importantes del juego, señalando que representa la misma inocencia que caracterizaba a Ellie en la primera entrega.[8]: 1:39:33 El nombre «Lev», de origen hebreo y que significa «corazón», constituye un homenaje al protagonista de la novela City of Thieves (2008) de David Benioff, una de las obras favoritas de Druckmann.[54]
La representación de Lev generó diversas reacciones dentro de la comunidad transgénero. Algunos críticos expresaron preocupaciones respecto al uso del nombre de nacimiento del personaje por parte de los antagonistas, el hecho de que fuera creado por guionistas cisgénero, y el enfoque dramático y trágico de su historia.[62][65] Waverly, de Paste, valoró positivamente la decisión de asignar el papel a un actor de la comunidad, aunque opinó que «se daba un énfasis excesivo a su identidad de género y al sufrimiento que le provoca». Afirmó que la historia de Lev parecía más «dirigida a jugadores cisgénero, para suscitar empatía y reflexión, que a representar una experiencia trans genuina».[66] Por el contrario, Stacey Henley, en VG247, sostuvo que si bien la historia de Lev no es perfecta, constituye un «avance significativo en la representación de este tipo de personajes en los videojuegos». Subrayó que se trata de una figura «carismática y fundamental cuya identidad no se reduce exclusivamente a su género».[65] Riley MacLeod, de Kotaku, vio a Lev como una afirmación de la existencia de personas transgénero, y argumentó que corresponde al jugador otorgarle un significado más profundo.[67]
Yara (Victoria Grace) es la hermana de Lev y miembro de los Serafitas. Después de que Lev transicionó a hombre, ambos hermanos se vieron obligados a huir. Yara fue capturada por los Serafitas que le destrozaron el brazo izquierdo antes de ser salvada por Lev. Abby ayudó a los hermanos a encontrar un lugar seguro por una noche. Al día siguiente, los llevó con sus amigos Owen y Mel; esta última, que es cirujana, determinó que Yara padecía de síndrome compartimental y se vio obligada a amputarle el brazo. Yara aceptó la invitación de Owen para escapar a Santa Bárbara, pero Lev, reacio a dejar atrás a su madre, viajó a la isla de los Serafitas. Yara y Abby lo rastrearon y descubrieron que mató a su madre en defensa propia. Al abandonar la isla, Yara mató a la líder del WLF, sacrificándose para que Lev y Abby pudieran escapar.
Durante una propuesta inicial en el desarrollo, se consideró que Yara fuera una transgénero en lugar de Lev, pero Druckmann prefirió mantenerla como una seguidora más tradicional de los Serafitas.[8]: 1:39:33 Grace ya estaba familiarizada con The Last of Us antes de obtener el papel. Su madre encontró el anuncio mediante una oferta laboral publicada bajo un nombre en clave. Grace se interesó de inmediato en el personaje debido a la «fuerza, valentía y entrega» de Yara.[63] Después de enviar una grabación, fue invitada a una segunda audición, donde se reunió con Druckmann y actuó junto a Bailey y Gross.[63] Grace sintió que, como la menor de cinco hermanos, su fuerte vínculo con su familia se reflejaba en el papel: «Me rompería un brazo con un martillo por cualquiera de mis hermanos».[63] Apreció que los guionistas permitieran que los personajes se definieran por sus personalidades, y no solo por su origen asiático estadounidense.[63] La ropa informal de Yara representó su transición hacia una actitud más despreocupada, en contraste con su estricta crianza.[27]: 145
Emanuel «Manny» Alvarez (Alejandro Edda) es un exluciérnaga que sirve como soldado del WLF junto a Abby, su amiga. Cuando Abby mata a Joel a golpes, Manny escupe sobre el cadáver de Joel. Conduce a Abby y Mel hacia la base del WLF cuando son atacados por los Serafitas, lo que los obliga a continuar a pie. Esa noche, ayuda a Abby a salir a escondidas de la base para buscar a Owen. Dos días después, Manny es enviado al puerto para asegurar botes para la invasión planeada contra los Serafitas, pero su equipo es asesinado en un tiroteo con Tommy. Poco después se encuentra con Abby y ambos avanzan hacia Tommy, pero este le dispara a Manny en la cabeza, matándolo al instante.
Edda había trabajado previamente con Naughty Dog en Uncharted 4: El desenlace del ladrón (2016). La directora de castin de la desarrolladora, Becky Todd, contactó a Edda mientras él pasaba la Navidad con su abuela en México, informándole que Druckmann quería hablar con él; ambos hablaron por teléfono y Druckmann le ofreció el papel de Manny. Edda, quien tiene poca experiencia con videojuegos, aceptó porque lo consideró una experiencia única y creativa.[68] Durante la producción, Druckmann permitió que Edda aportara creatividad a su interpretación, agregando pequeños detalles al personaje según le pareciera adecuado; por ejemplo, Edda consideró que Manny bebería mezcal en lugar de whisky, como sugería el guion, y la línea fue modificada.[68]: 4:37 Durante la escena de la muerte de Joel, Edda interpretó a Manny como el guardaespaldas de Abby, con una actitud fría y dura, aunque reconoció que la escena fue emotiva, ya que fue su última toma con Baker.[68]: 10:38 Edda sintió que, con Manny, Abby podía hablar con mayor comodidad y sinceridad.[68]: 16:05 Las escenas finales de Manny en el puerto fueron de las últimas en filmarse durante el día, y Edda consideró que el cansancio de los actores aportó intensidad y desesperación a sus actuaciones.[68]: 20:33 El diseño de Manny se basó en la apariencia física de Edda, lo que aumentó el tiempo que trabajó en el juego; participó durante aproximadamente dos años.[68]: 6:19
Danny Ramirez interpretó a Manny en la segunda temporada de la adaptación televisiva de HBO.[69]
Los personajes recibieron una recepción mixta por parte de la crítica. Kirk McKeand, de VG247, describió a cada uno como «complejo y humano».[21] Chris Carter, de Destructoid, expresó empatía por los protagonistas,[16] una opinión compartida por Dornbush, de IGN, quien consideró especialmente «fascinante» el desarrollo de Ellie.[19] También se valoró positivamente la diversidad del elenco, destacada por McKeand, de Kotaku, y Eliana Dockterman, de Time.[70][71] Andy McNamara, de Game Informer, señaló que la ausencia ocasional de personajes secundarios resultaba inquietante, ya que el jugador lograba encariñarse con ellos.[72] Webster, de The Verge, elogió la relación entre Ellie y Dina, aunque señaló cierta disonancia en el comportamiento de Ellie entre las secuencias jugables y las cinemáticas.[55] De forma similar, Kallie Plagge, de GameSpot, encontró que la evolución de Abby como personaje no era coherente con la intensidad de sus enfrentamientos contra enemigos humanos.[73] Maddy Myers, de Polygon, y Rob Zacny, de Vice, criticaron la incapacidad de los personajes para aprender de sus errores.[74][75] Por su parte, Michael Leri, de GameRevolution, consideró que los nuevos personajes eran menos atractivos que los de juegos anteriores de Naughty Dog.[76] Yannick Le Fur, de Jeuxvideo.com, opinó que personajes como Jesse y Manny carecían de desarrollo y servían únicamente como herramientas narrativas.[77]
Las actuaciones del elenco recibieron elogios generalizados, especialmente las de Johnson, Baker y Bailey.[21][16][20][78] McKeand destacó que las interpretaciones potenciaban los momentos más intensos de la narrativa.[21] Tim Biggs, de The Sydney Morning Herald, valoró las actuaciones por su capacidad para dotar de credibilidad a los personajes.[79] Para Lewis, de Entertainment Weekly, la actuación evitó que el juego «fuera consumido por su propia oscuridad».[48] James Dyer, de Empire, describió las interpretaciones como «increíblemente matizadas, dignas de la gran pantalla» y destacó a Woodward y Alexander como revelaciones.[80] Keza MacDonald, de The Guardian, consideró que la actuación contribuía a que la historia fuera mucho más efectiva en lo emocional.[78]