La historia de los accidentes ferroviarios en Chile es una crónica dolorosa que se entrelaza con el desarrollo de este modo de transporte dentro del país. Desde el siglo XIX, cuando las vías férreas comenzaron a expandirse por el territorio chileno, se han registrado numerosos accidentes que han dejado un número considerable de víctimas y daños materiales. Tales incidentes varían en magnitud y contexto, desde colisiones y descarrilamientos hasta atentados y fallos estructurales en puentes y vías. Algunos de los accidentes más recordados incluyen el accidente ferroviario de Queronque de 1986 o el de San Bernardo de 1955. A pesar de los avances en seguridad y tecnología, los accidentes ferroviarios continúan siendo un tema de preocupación pública y un reto para las autoridades y las empresas de transporte.