1,2-butanodiol es un diol que fue descrito por primera vez en 1859 por Charles Adolphe Wurtz.[1] Es creado a escala industrial como un subproducto de la creación de 1,4-butanodiol a partir de butadieno,[2] y como subproducto del hidrocraqueo catalítico de almidones y azúcares como el sorbitol a etilenglicol y propilenglicol.[3][4] Es utilizado para producir poliéster, resinas y plastificantes,[2][5] y es una potencial materia prima para la producción de Ácido alfa-cetobutírico, un precursor de varios aminoácidos.[6]