El vestido saco es un tipo de indumentaria femenina que recibe su nombre por su diseño similar al de un saco o una bolsa.
Su hechura se caracteriza por una holgura de anchura diversa a la altura de la cintura que vuelve a estrecharse a la altura de las piernas. Fue inventado por Cristóbal Balenciaga en los años 1950 provocando un gran escándalo,[1][2][3] y relanzado posteriormente por Christian Dior. El vestido saco de cóctel diseñado por Balenciaga en 1957 en crêpe gris es un modelo que resaltaba la espalda y la cadera estrechándose por debajo de las rodillas.[4][5] En la actualidad, se considera un referente en el mundo de la moda.
Los diseñadores contemporáneos siguen presentando vestidos saco en sus colecciones en diversos cortes y materiales tales como algodón, pana, etc.