La Unidad Habitacional El Rosario es un gran conglomerado de unidades habitacionales compuestas por condominios de interés social ubicada en la alcaldía Azcapotzalco, en la Ciudad de México y el municipio de Tlalnepantla del Estado de México. Por su extensión de 350 hectáreas (3.50 km²), es la unidad habitacional más grande de México y Latinoamérica.[1]
Está delimitada al norte por el Río de los Remedios y la Autopista Naucalpan-Ecatepec (la cual es parte sur del Anillo Periférico), al sur por la colonia Hacienda del Rosario y la avenida Aquiles Serdán (una de las avenidas vía rápida más importantes de la Ciudad y el Estado de México), al poniente por la Calzada de Las Armas y al oriente por el Eje 5 Norte. Para los capitalinos es conocida simplemente como El Rosario.
En el siglo XVI la orden de los jesuitas tenía una gran extensión de tierras cercanas a Azcapotzalco, donde levantaron un monasterio y una iglesia que pusieron bajo la advocación de la Virgen del Rosario, y es así como se le conoce al rumbo. Cuando los jesuitas fueron expulsados de México, en el año de 1767, muchos ricos mineros adquirieron algunas de esas propiedades y fue Pedro Romero de Terreros, primer conde Marqués de San Cristóbal y San Francisco, quien obtuvo ese gran latifundio de El Rosario, convirtiéndolo en una hacienda. Posteriormente el lugar es fraccionado y ahora constituye un gran conjunto habitacional.[2] Poosteriormente loo compraron los hermanos Martín y Miguel Oyamburu, terratenientes, industriales que entre otras cosas erasn Socios y fundadores de La Cerveceria Modelo, El Banco Español Mexicano, las Llantas Euzkadi. A ellos se debe la creación de la Colonia Lindavista y la venta de los terrenos aledaños a su hacienda.
El Rosario y Pirineos eran dos haciendas lecheras, las mejores de México en ese momento cuyos propietarios Martin Oyamburu y Miguel Oyamburu donaron grandes extensiones al Infonavit y la Secretaria de Educación Píblica, por eso la Escuela Martin Oyamburu lleva el nombre d euno de ellos.
La primera fase de construcción de El Rosario inició en 1972, cuando el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (INFONAVIT), planeó la edificación de departamentos de interés social en un área despoblada entonces en terrenos pertenecientes a la Hacienda de El Rosario. El plan original contemplaba hacerla autónoma en abasto, pago de servicios, educación y esparcimiento, así como la construcción de avenidas internas que le dieran movilidad (actualmente son visibles las estructuras de los viaductos que traspasaban los edificios)[1]. La primera fase de El Rosario 1 tiene edificios diferenciados con nombres de personajes de la Historia de México.
El modelo urbanístico de El Rosario se apega a los impuestos por Teodoro González de León y Pedro Ramírez Vázquez desde la década de los 60s consistentes en andadores, pasillos y departamentos unifamiliares para 4 personas. La infraestructura urbana construida en décadas pasadas actualmente está deteriorada.
Esta unidad contaba en un principio con unas zonas de esparcimiento en donde se recreaban los Oyamburu y como los lagos que contaban con agua y algunos hasta con lanchas y patos, pero con el crecimiento de la población unos de esos lagos fueron convertidos en estacionamientos y en otros se construyeron más unidades habitacionales. Estaba planeada adecuadamente, pues tenía los servicios primarios garantizados, los accesos a la educación en todos los niveles estaban estratégica mente ubicados, la eliminación de áreas recreativas sustituidas por más casas generaron que los recursos disminuyeran, la demanda educativa aumento pues el crecimiento urbano no se dio a la par con los servicios que la población requiere, las áreas de esparcimiento generan un desorden social, pues los jóvenes en parte necesitan espacios para recrearse, existían casetas de vigilancia en las áreas de esparcimiento las cuales desaparecieron con la construcción de nuevas viviendas, por ende se genera mayor inseguridad y vandalismo, que repercute en la aparición de jaulas para proteger automóviles en los estacionamientos que generan que dan un mal aspecto a la colonia además de la apatía de los vecinos no permite que se uniformen los colores de los edificios. Actualmente enfrenta problemáticas por su ubicación de límite entre dos entidades, lo que deriva en inseguridad pública,[3] falta de mantenimiento a edificios así como carencia de infraestructura urbana.[4]
Con el paso del tiempo fueron agregándose sin control más secciones con viviendas de distinto tamaño, precio y calidad de materiales, lo que ha derivado en un sector sensible y problemático por su tamaño y fisonomía intrincada.[5]
Se ubica en la zona de la terminal El Rosario de las líneas 6 y 7 del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro.
Se ubica cerca de los talleres de mantenimiento del Metro de las líneas 6 y 7 del mismo. Fue construido a principios de 2014 y finalizado a mediados del 2015. La estación El Rosario es la terminal poniente de la misma línea, que corre de El Rosario a Villa de Aragón.
Antiguamente la Ruta 100 tuvo un buen número de rutas que terminaban o atravesaban por esta zona:
Hoy en día se pueden contabilizar rutas como:
En el paradero del Metro El Rosario parten líneas de autobuses hacia municipios del Estado de México como:
Hay microbuses de la Ciudad de México a:
Así como rutas de la Red de Trolebuses de la Ciudad de México:
Se ubican en la zona 10 primarias:
Se ubican en la zona 6 secundarias: