El tute subastado o, simplemente, subastado o subasta es un juego de cartas que se juega con baraja española, derivado del tute corriente, pero con ciertas características que lo diferencian.
Las cartas tienen el mismo valor que en el tute, es decir, en orden descendente, as (11), tres (10), rey (4), caballo (3) y sota (2) y las demás cartas, llamadas cartas blancas o papeles, no tienen valor.
El subastado es un juego para tres jugadores, a diferencia de los cuatro del tute, aunque se puede jugar por equipos 2 a 2. Si cuatro o más personas se unen para jugar, una de ellas descansa y es la que reparte las cartas. Como el número de cartas (40) de la baraja no es divisible por tres, se quitan los cuatro doses o se deja una carta boca a bajo que el que se lleve la subasta podrá coger y aceptarla descartando otra o volver a dejarla en la mesa. Pero ello únicamente si juegan 3 personas, en el caso de ser 4 jugadores se reparten 10 cartas a cada jugador y se puede jugar de forma individual o por equipos.
Es aquí donde se encuentran las mayores diferencias entre el subastado y el tute. Si bien en el tute la determinación del palo que pinta es meramente casual y viene determinada por la última carta de la baraja, en el subastado primero se reparten las cartas y comienza la subasta:
Lo normal es que gane el jugador que primero acumule 500 puntos, pero se puede acordar otro número de tope.
Una de las diferencias más notables se da, durante el proceso de subasta, a la hora de hablar. Está permitido anunciar los siguientes juegos en cada palo:
No es obligatorio anunciar todos los juegos ni cantarlos enteros. Lo normal es anunciar las bazas firmes al compañero,y dado que se trata de un juego de parejas se trata de informar al compañero, pero ello no quita que no es obligatorio ni anunciar todo lo que se tiene, o incluso que esté permitido anunciar en falso.
En algunos lugares, se permite cantar cualquier combinación de figuras, as y tres.
Durante la subasta del juego, que comenzará en 65, el primer jugador de cada pareja puede esperar posponiendo de este modo el anuncio de sus cartas al de su compañero. El "esperado" tendrá que hablar antes que el segundo rival, alterando así la secuencia original. La puja mínima suele ser de 5 puntos, aunque existen variedades regionales: en las Rías Baixas es de 10 y en zonas de Lugo de 1 (en dichas zonas se juega a la exacta, es decir, hacer exactamente la subasta por ejemplo 81 puntos). En todas partes se sube en múltiplos de la puja mínima.
De nuevo en algunas partes, diferencian entre petar y marcar. Indicando el primero que se posee la carta mayor del palo que se está petando y el segundo que se falla el palo de la baza.
Se juega a 1000 puntos y, en el caso de perder el subastador, no se dividen sino que cada uno de los ganadores recibe la cantidad completa.
Existen diversas variantes del juego. Una de ellas, muy popular en Galicia, es la "subasta a cuatro", que se juega por parejas a 1.000 puntos.
Otra es el subastado de dos parejas en colaboración-oposición, practicando el anuncio, es decir, diciendo en alto las cartas que se tienen, sin decir el palo, para orientar al compañero y que sea él el que ponga el precio de la subasta a la vista de sus cartas y del anuncio. Su propio compañero puede volverle a marcar, según las claves expuestas a continuación, y subir con ello el precio de la subasta, de la misma manera que los contrincantes (cada uno en su turno), hasta que los dos jugadores de un mismo equipo "pasen" y se quede con la subasta el último en pujar.
Sin embargo, si los dos jugadores del mismo equipo pasan de mano, sólo el primero en hablar del equipo contrario puede subir la puja de su compañero, ya que en el momento en que él ha hablado no ha podido escuchar a su compañero previamente. En algunas variantes se puede utilizar la palabra "espero", con la cual se puede oír al compañero antes de subastar.
El jugador que se queda con la subasta escoge triunfo (palo que pinta) y empieza saliendo. Cuando éste o su compañero hacen la primera baza, pueden cantar él y el compañero a la vez, pero solo un cántico cada uno. En caso de tener más cánticos, tendrán que esperar a su siguiente baza. La pareja contraria no necesita cantar porque su objetivo es que el que subastó no consiga los puntos.
Si un jugador tiene varios cánticos, está obligado a cantar en primer lugar "las cuarenta".
En esta variedad por parejas es muy importante el "marque" o "anuncio". Consiste en decir tus cartas a través de valores predeterminados. Estos son:
Aunque existen más "marques" tipo, estos son los más usados. Si alguien canta mal o miente caerá en un renuncio. Todos pueden repetirse, por ejemplo: "130 con 28 y 28", "dos ases y un tres para 90".
Otra diferencia del subastado por parejas es el "pete", que consiste en golpear la mesa al tiempo que se echa la carta, queriendo decir con ello que la próxima baza de ese palo se la lleva él, ya sea porque tenga el as o porque la va a fallar.