Salvia sessei, conocido comúnmente como sabanito, es una especie de planta de la familia de las lamiáceas, nativa de México.
Salvia sessei | ||
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Taxonomía | ||
Reino: | Plantae | |
División: | Magnoliophyta | |
Clase: | Magnoliopsida | |
Orden: | Lamiales | |
Familia: | Lamiaceae | |
Subfamilia: | Nepetoideae | |
Tribu: | Mentheae | |
Género: | Salvia | |
Subgénero: | Calosphace | |
Sección: | Erythrostachys | |
Especie: |
S. sessei Benth., 1833 | |
Salvia sessei es un arbusto de hasta 4 m de alto, de fuste leñoso de unos 3.5 cm de diámetro. Las hojas son pecioladas, ovado-oblongas, glabras en el haz y pubescentes en el envés, de 4 a 12 cm de largo y 1.6 a 8 cm de ancho, ápice acuminado, margen aserrado en la mitad superior y entero en la mitad inferior. La inflorescencia es una címula reducida de una flor bilabiada grande de color rojo brillante, agrupada en verticilastros de dos flores, estos a su vez agrupados en panículas. El cáliz es inflado-campanulado, glabro, membranáceo, del mismo color que las flores (opaco con la edad). El fruto es una núcula encerrada en el cáliz.[1][2][3]
Salvia sessei es endémica de México, donde se distribuye de Jalisco a Puebla y Oaxaca, con una distribución disyunta en Tamaulipas. Es un elemento ocasional en matorral, selva baja caducifolia y bosque mixto, en regiones de clima subtropical, entre los 1,100 y los 2,250 metros sobre el nivel del mar.[3]
Salvia sessei fue descrita en 1833 por George Bentham en Labiatarum Genera et Species: 288.[4][5]
Ver: Salvia
sessei: epíteto dado en honor al botánico español Martín Sessé y Lacasta quien, junto con José Mariano Mociño, realizó la colecta de la especie en el marco de la Real Expedición Botánica a Nueva España.
Salvia sessei es popular en jardinería debido a sus vistosas flores.[6] Requiere un sustrato bien drenado, abundante riego en verano y reducido en invierno. No tolera las heladas.[7]
Como varios miembros de su género, la especie contiene diterpenos, unos compuestos orgánicos de uso potencialmente terapéutico.[8] Específicamente, Salvia sessei se emplea en medicina tradicional en el tratamiento de erisipela. Un estudio ha comprobado su efecto antiinflamatorio, antibacterial y antioxidante.[9]
Los nombres comunes más difundidos en español son "sabanito" y "pipilolxóchitl".[9] El segundo proviene del náhuatl pipilōlxōchitl, que significa "flor de arete" (compuesto de pipilōlli 'pendiente, arete' y xōchitl 'flor').[10] Con este nombre y su variante zazapipilxōchitl lo incluyó Francisco Hernández de Toledo en Rerum medicarum Novae Hispaniae Thesaurus, p. 120.[11]