En tauromaquia, la revolera es una suerte o lance que se realiza con el capote. La revolera es una larga natural por bajo prolongada con una vuelta sobre los pies; una larga natural que acompasa una embestida curvada del toro, llevada en redondo a capa abierta. En la revolera es esencial que se abra la capa alrededor del torero, por lo cual se la cambia de mano al pasarla por detrás, y otra vez por delante, al salir de la suerte. Es una suerte barroca y sencilla.[1] La revolera puede incluirse dentro del grupo de las largas, ya que el torero suelta el capote de una mano.[2]
Para su correcta ejecución, se debe iniciar la suerte como si de una verónica se tratase, lanzando el capote y esperando la embestida del toro. Cuando el toro se encuentra enganchado en el engaño, se suelta la mano de dentro y se conduce la embestida para después girar el cuerpo 360° a la vez que el capote continua girando alrededor del torero.[3]
Muchos han sido los versos y obras que se han escrito incluyendo la revolera en alguna de sus líneas. José Bergamín decía lo siguiente en su obra La claridad del toreo:[4]
Un vuelo de revolera
le quitó al toro los pájaros
que llevaba en la cabeza
La mayoría de toreros han recurrido a este lance para rematar sus series o tandas con el capote. Podemos encontrar, entre otros, a toreros como Roca Rey[5] o José Tomás.[6]