La Real Casa de Pajes (también, Real Casa de Caballeros Pajes, o simplemente Casa de Pajes) fue una institución educativa de la corte española destinada a educar a jóvenes nobles para el servicio del rey de España y su familia.
El origen de los pajes como colectivo puede trazarse a principios del siglo XVI. La consolidación como institución se produjo hacia 1570, cuando Felipe II compró las casas de Felipe de Guevara en Madrid para servir como Casa de Pajes.
Sufrió tres grandes reformas durante el siglo XVII:
El siglo XVIII también supondría distintas reformas sobre la institución en distintos años. Destacó la de 1792 en que se publicó un nuevo Reglamento para la Real Casa de Pages de S.M.: con las instrucciones y advertencias para sus ayos y maestros.[1]
La casa desaparecería en 1822, durante el Trienio Liberal, como consecuencia de las quejas que los propios pajes habían representado en carta al Mayordomo Mayor el 21 de octubre de 1821.
La Casa de Pajes se encontraba bajo la responsabilidad del Caballerizo mayor del rey. Los aspirantes a ser admitidos en la Real Casa de Pajes debían de ser nobles y contar con una edad de entre ocho y doce años.
De acuerdo con su reforma de 1761 la Casa de Pajes debía de estar compuesta de las siguientes personas: ayo, capellán, un maestro de primeras letras, otro de gramática, otro de retórica y filosofía y otro de matemáticas; un maestro de armas, otro de lengua francesa y un último de baile; un mayordomo, un médico, un cirujano, seis ayudas de cámara, dos ayudas de cámara como enfermeros, un sastre, un comprador, un cocinero, un ayudante, dos mozos, un guardarropa, una planchadora, dos lavanderas.
Desde 1570 hasta su desaparición en 1822 tuvo su sede en la Casa de Pages al sur del espacio ocupado por la plaza situada frente al lugar donde se alzarían el Alcázar de Madrid primero, y después del Palacio Real nuevo.