El ratio de liquidez (también denominada razón corriente o relación corriente), es uno de los indicadores de liquidez más usados, tiene como objeto verificar las posibilidades de una empresa para afrontar compromisos financieros en el corto plazo.[1]
La razón corriente (Rc) se determina por la expresión:
Rc = Activo Corriente / Pasivo Corriente
tanto el Activo corriente, como el Pasivo corriente se obtienen del balance de la empresa.