El polkagris (plural: polkagrisar) es una barra de caramelo o bastón de caramelo recto propio de la gastronomía sueca que fue inventado en 1859 en la ciudad de Gränna (Suecia) y que sigue siendo popular en la tradición confitera de esta ciudad.[1][2] El polkagris tradicional es rojo y blanco, con sabor a menta.
Polkagris es también el nombre de una bebida que tiene un sabor parecido al del caramelo. Contiene vodka, crema de menta blanca, granadina, sprite y dos trozos de cereza.[3]
El nombre polkagris alude a la polca, baile que era una novedad en Europa cuando el caramelo fue inventado.[4]
Así, el polka en el nombre del caramelo alude a la forma en que se elabora tradicionalmente, retorciendo tiras de masa de azúcar rojas y blanca. Gris significa ‘cerdo’, y aparece en el nombre probablemente por razones humorísticas.
El polkagris fue inventado en Gränna[5] en 1859 por Amalia Eriksson,[6] una viuda pobre de 25 años.[7] Amalia necesitaba mantener a su familia tras la muerte de su marido, para lo que obtuvo permiso para abrir una panadería en la que hacer dulces y caramelos de menta. Mantuvo la receta en secreto toda su vida.[7]
El caramelo se hace con masa de azúcar, que se cuece, se amasa sobre una mesa de mármol, se estira y se trenza a mano hasta el tamaño correcto. Contiene menta, azúcar, agua y una cantidad muy pequeña de vinagre. Está a la venta en unas 10 tiendas de la ciudad.[7]
Se encuentra en diversas formas, tamaños y colores, pero la versión roja y blanca con sabor a menta es la original.[7] Su receta ha sido incluida en libros de recetas suecos.[8]