En la mitología griega, Nireo (en griego: Νιρεύς) es el caudillo del contigente de Sime durante la guerra de Troya, que aportó tres,[1] dieciséis[2] o cincuenta y tres naves.[3] Hijo de Aglaya y del soberano Cáropo, a Nireo se le consideraba el más hermoso de los aqueos que marcharon para combatir en Ilión, con la excepción del propio Aquiles.[1] Focio, en cambio, lo imagina como hijo de Heracles[4] pero otro lo creen uno de los amantes de Heracles y no uno de sus hijos.[5] Sea lo que fuere Nireo no era especialmente fuerte físicamente[6] y murió a manos de Eurípilo[7] o Eneas.[8] Se celebró un funeral por él y su propio pueblo lo incineró.[9]
En el conflicto militar con el rey de Misia, Télefo, que tuvo lugar de camino a Troya (durante el primer intento fallido de llegar a la ciudad), Nireo mató a la esposa de Télefo, Híera, que luchaba desde un carro «como una amazona».[10] Diodoro Sículo dice que antiguamente la isla de Sime estaba deshabitada, y los primeros hombres en poblarla llegaron con Tríope, a quienes conducía Ctonio, hijo de Poseidón y Sime, cuyo nombre tomó la isla. Posteriormente reinó en la isla Nireo que se convirtió en soberano de la isla y señor de una parte de Cnidia.[11]
Tzetzes, sin embargo, opina que Nireo sobrevivió a la guerra y, junto con Toante, tras verse envueltos en la tormenta que dispersó a las naves griegas, desembarcaron primero en Libia y luego navegaron hacia los argirinos y las montañas ceraunias, donde se establecieron cerca del monte Lacminion y el río Aias.[12]