Nacido en Santomera, se unió al fútbol base del Valencia C. F. en 2014 procedente del C. F. Santomera.^[2]​ El 31 de enero de 2017 firmó por el Manchester City por un valor de 300 000 euros.^[3]​

El 23 de septiembre de 2020 se marchó al R. C. D. Espanyol para jugar en su filial en la Segunda División B,^[4]​ debutando el 18 de octubre al entrar como suplente en los minutos finales de una victoria por 2-1 frente a la A. E. Prat.^[5]​ Su primer gol llegó el 3 de abril de 2022 al marcar el primer tanto del partido en una victoria por 2-0 frente a la S. D. Formentera en la Segunda Federación.^[6]​

Logró debutar con el primer equipo el 13 de agosto al entrar como suplente en los minutos finales de un empate por 2-2 frente al Celta de Vigo en la Primera División de España.^[7]​^[8]​

El 1 de septiembre de 2023 fichó por el Atlético de Madrid "B".^[9]​ Jugó 32 partidos en la Primera Federación y en agosto de 2024 se unió al Albacete Balompié por dos temporadas.^[10]​ En la primera de ellas disputó 25 encuentros y al inicio de la segunda llegó a un acuerdo para rescindir su contrato.^[11]​ Entonces se marchó a Portugal para jugar en el F. C. Alverca.^[12]​

Fue internacional con las categorías inferiores de España, con las que participó en el Campeonato Europeo Sub-17 de la UEFA 2018 y llegó a jugar hasta la selección sub-19.^[13]​

En 2020 tomó la decisión de representar a Marruecos.^[13]​ En 2022 fue convocado con la sub-23 para dos amistosos contra Senegal.^[14]​

  Actualizado al último partido disputado en junio de 2025.

Fuente: BDFutbol.ç

Existe una comunidad en internet conocida como los Nabileros, considerados los más grandes admiradores de este jugador. Nabil dejó una huella especial en parte de la comunidad manchega, donde su manera de entender el fútbol, su alegría dentro y fuera del campo y su carácter fiestero fueron vistos como un estilo de vida más que como una simple forma de jugar.

Entre los Nabileros surgió la frase que se convirtió en emblema: “Nabil Touaizi es clave”. Esta expresión no solo refleja su importancia en el terreno de juego, sino también el valor simbólico que tiene para sus seguidores: para ellos, Nabil representa la esencia del fútbol libre, impredecible y lleno de talento natural.

La comunidad acostumbra a reunirse en foros y redes sociales para compartir recuerdos, vídeos, goles y anécdotas del jugador, manteniendo viva la memoria de sus actuaciones más destacadas. Con el tiempo, esta afición se consolidó como un movimiento cultural dentro del entorno digital, en el que la frase icónica se utiliza como saludo, broma interna y recordatorio de la grandeza del jugador.

Cabe destacar que la frase fue acuñada originalmente por @loborex20sams_version, mejor conocido como Loborex, uno de los primeros nabileros y máximo impulsor de la comunidad en internet.

Gracias a todo ello, Nabil se ha ganado tanto el cariño como el respeto de la grada allá donde esté, convirtiéndose en un símbolo que trasciende lo deportivo para ocupar un lugar especial en la memoria colectiva de sus seguidores.