El Museo de Historia de Barcelona (en catalán: Museu d'Història de Barcelona) conocido también por sus siglas MUHBA o MHCB, es un museo de ciudad que conserva, estudia, documenta, divulga y expone el patrimonio histórico y la historia de Barcelona desde sus orígenes hasta el presente. Depende del Ayuntamiento de Barcelona a través del Instituto de Cultura de Barcelona (ICUB).[2] Tiene su sede principal en la plaza del Rey, en el corazón de la Barcelona antigua,y gestiona varios centros patrimoniales distribuidos por los distritos y barrios de la ciudad. Fue inaugurado el 14 de abril del año 1943, siendo su impulsor y primer director el historiador Agustí Duran i Sanpere.[3]
Museo de Historia de Barcelona | ||
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Museu d'Història de Barcelona | ||
Bien de Interés Cultural (1 de marzo de 1962, RI-51-0001320) | ||
La casa Padellás, sede central del museo | ||
Ubicación | ||
País | Cataluña | |
Localidad | Barcelona | |
Dirección | Plaza del Rey, s/n 08038 | |
Coordenadas | 41°23′02″N 2°10′40″E / 41.383903888889, 2.1776911944444 | |
Tipo y colecciones | ||
Tipo | Público | |
Clase | Museo de historia | |
Superficie | 4000 m² | |
Historia y gestión | ||
Inauguración | 14 de abril de 1943 | |
Director | Joan Roca i Albert | |
Información del edificio | ||
Edificio | Casa Padellás | |
Estilo | Gótico | |
Construcción | Siglos XV-XVI | |
Información para visitantes | ||
Visitantes |
551 623[1] 548 783 (2012) 481 802 (2011) 514 037 (2010) | |
Mapa de localización | ||
Geolocalización del museo | ||
Sitio web oficial | ||
A partir de la Exposición Universal de Barcelona de 1888 se registran varios intentos institucionales de configurar una exposición permanente y unas colecciones específicas de historia de Barcelona. Los más relevantes fueron la reunión de objetos relacionados con la historia de Barcelona formada dentro del Museo de Arte y Arqueología que estuvo ubicado en el antiguo arsenal (actual Parlamento de Cataluña) de la Ciudadela de Barcelona,[4] así como la exposición organizada por Agustí Duran i Sanpere en el Pabellón de Barcelona de la Exposición Internacional de Barcelona de 1929, que ya no constituía una mera reunión de objetos singulares, sino que ofrecía un discurso explicativo sobre la ciudad. Por otra parte, desde 1877 la capilla de Santa Ágata del Palacio Real Mayor de Barcelona había sido habilitada para finalidades museísticas como sede del Museo Provincial de Antigüedades, que permaneció en la citada capilla hasta 1932.
El traslado, piedra a piedra, de la casa Padellás, desde su emplazamiento original en la calle Mercaders hasta la plaza del Rey esquina calle del Veguer, llevado a cabo en 1931 para salvaguardar la citada casa, afectada por las obras de apertura de la Vía Layetana, fue determinante para el origen del museo. Los trabajos de cimentación de la casa Padellás en su nuevo emplazamiento pusieron al descubierto los restos de una parte significativa de la antigua ciudad romana y visigótica y dieron pie a una importante intervención arqueológica en toda la plaza del Rey que continuó hasta la Guerra Civil de 1936-1939. Estos hallazgos, junto con la recuperación del Palacio Real Mayor tras el desmantelamiento del Museo Provincial de Antigüededes instalado en la capilla de Santa Ágata (1932) y la rehabilitación del Salón del Tinell (hasta 1936 ocupado por la comunidad de monjas benedictinas del antiguo convento de santa Clara de Barcelona) confirmaron la idoneidad del conjunto monumental de la plaza del Rey como emplazamiento del proyectado museo de historia de Barcelona.
El museo se inauguró después de la guerra civil española, en 1943, como Museo de Historia de la Ciudad. Su primer director fue Agustí Duran i Sanpere, que venía madurando su concepción desde antes de la guerra.[5] Inicialmente, el museo estaba integrado en un organismo municipal denominado Instituto Municipal de Historia de Barcelona, y permaneció encuadrado en él hasta 1957, cuando Duran i Sanpere se jubiló.[6][7] A nivel de divulgación de la historia de la ciudad, una iniciativa del Instituto Municipal de Historia que obtuvo un gran eco ciudadano fue la emisión de un programa radiofónico semanal denominado Barcelona. Divulgación Histórica (1944-1973).
El núcleo fundacional del museo se basaba en las colecciones municipales de historia de Barcelona que se habían ido formando desde el siglo XIX y comprendía el conjunto monumental de la plaza del Rey (casa Padellás, excavaciones, Salón del Tinell y capilla de santa Ágata). Gradualmente, el museo fue incorporando otros espacios como el Templo de Augusto, la vía sepulcral romana de la plaza de la Villa de Madrid o los restos de una villa romana encontrados en la plaza Antonio Maura (no visitables). Asimismo, fueron integrados al museo la Galería de Catalanes Ilustres y Villa Joana, en Vallvidrera, dentro del parque de Collserola, que el Ayuntamiento de Barcelona acordó convertir en un museo dedicado a la memoria del poeta Jacinto Verdaguer (1962).
De la misma forma que uno de los rasgos que definen el museo de historia de Barcelona desde sus primeros años de existencia es la integración de varios centros patrimoniales, también caracteriza al MUHBA su directa implicación con la actividad arqueológica y la investigación sobre este campo. El Servicio de Arqueología de Barcelona está vinculado en estas etapas.
Además de las excavaciones en la plaza del Rey y en otras zonas de la ciudad antigua, las intervenciones arqueológicas llevadas a cabo por el museo en la muralla romana permitieron hallar y seguidamente incorporar a sus colecciones piezas muy representativas de la ciudad romana, al igual que la excavación bajo la Catedral de Barcelona, que supuso el hallazgo del baptisterio paleocristiano (1968).[8]
La construcción de una cubierta de hormigón para cubrir el yacimiento arqueológico bajo la plaza del Rey (1961) y la conexión directa entre este y la casa Padellás (1962) implicaron la plena integración de ambas partes en un único discurso museogràfico.
Duran i Sanpere había afirmado que la inauguración del museo, en 1943, se hizo con mucha precipitación.[9] Se puede considerar que el proyecto museístico del MUHBA no alcanzó la madurez hasta principios de los años 60 del siglo XX. No fue hasta 1962 que se publicó la primera guía del museo (reeditada en 1969).[10]
Según esta guía los principales polos de atracción del Museo eran, en aquel momento:
El año 1960 se inició la publicación de la revista Cuadernos de Arqueología e Historia de la Ciudad que reflejaba la actividad arqueológica e investigadora realizada por el Museo, esta última canalizada por el seminario de arqueología e historia de la ciudad.[11][12] Dos años más tarde aparecía la revista “Miscellanea Barcinonensia” (1962-1978), autodefinida como revista de investigación y alta cultura, que formalmente era una publicación del Ayuntamiento de Barcelona pero que también se elaboraba en el Museo y que reflejaba con detalle la vida cultural oficial en aquellos tiempos.
Con la llegada de los ayuntamientos democráticos (1979), en medio de un debate muy amplio sobre la renovación de los museos de Barcelona y de todo Cataluña en la cual tuvo una participación muy activa el director del Museo de entonces, Frederic-Pau Verrié, se hacía evidente la necesidad de una puesta al día de las viejas instalaciones del Museo y su replanteamiento conceptual. A estos anhelos respondieron diversos proyectos y hechos como la incorporación del edificio del siglo XIX anexo a la Casa Padellàs (con entrada por la Baixada de la Llibreteria, destinado a servicios administrativos y una nueva adecuación museográfica de un sector del subsuelo arqueológico, culminada en 1998, la cual supuso, entre otras cosas, la recuperación de las bóvedas medievales bajo el Salón del Tinell. ESta renovación museográfica se apoyaba en el conocimiento generado por las últimas investigaciones sobre la Barcelona antigua y alto medieval, recogidas en el libro De Barcino a Barcinona (2001).[13] En el año 2006 se abrió al público la exposición permanente dedicada a la Barcelona medieval, ubicada en la sala de las bóvedas bajo el Tinell.
A finales de la década de los 80 del siglo XX, el cierre de las obsoletas salas de exposición permanente de la Casa Padellás (1993) respondía, asimismo, a un propósito de renovación. Desde 1996, las mismas salas han acogido numerosas exposiciones temporales dedicadas principalmente a la revisión de aspectos de la historia de Barcelona, iniciadas con la exposición Barcelona en temps dels Àustries (1996) que mostraba una parte significativa de los fondos del museo de época moderna.[14]
Se construyó un techo de hormigón, haciendo posible la visita bajo tierra de 4000 metros cuadrados, de la antigua ciudad romana, pudiéndose ver hacia la plaza del Rey la base de las construcciones del siglo I a. C., como los restos de un barrio de talleres con tintorería, instalación vinícola etc., y en un nivel superior, de los siglos VI y VII la necrópolis visigótica.
Debajo del Salón del Tinell se pueden ver expuestas las esculturas romanas que se han encontrado, como un torso de Diana, bsutos de Antonino Pío y su esposa Faustina la Mayor y Agripina de mármol y el pequeño bronce de la Venus de Barcelona.
Siguiendo por las bóvedas románicas del subterráneo se une el recorrido con las excavaciones paleocristianas de la primitiva catedral con arranques de columnas de mármol blanco, el baptisterio y restos de una iglesia del siglo VI.
Antes de la reforma de 1992 en la Casa Padellás se conservaban en forma de exposición permanente objetos y documentos de los antiguos gremios medievales que exístian en la ciudad. Entre ellos el libro del "Comentari als Usatges de Barcelona de Jaume Marquilles del año 1440 e iluminado por Bernat Martorell. Pinturas de Francesc Soler Rovirosa y de Martí Alsina representando como era el Palacio Real Menor. En el piso superior se encontraban objetos de la estancia en la ciudad de Carlos I de España, y de la vida catalana y de sus costumbres desde el siglo XVI hasta el siglo XIX.
Actualmente la Casa Padellás también acoge exposiciones temporales de temática contemporánea.
Organizativamente, el museo pasó a depender del Instituto de Cultura de Barcelona ICUB, a raíz de la creación de este organismo municipal que agrupa todas las funciones municipales en materia de cultura (1996).
Durante las últimas décadas se ha adoptado la denominación Museo de Historia de Barcelona, acrónimo MUHBA (a partir de 2007). El museo ha reforzado su interés por la Barcelona contemporánea y ha crecido en red con la puesta en marcha del Centro de Conservación y Restauración (que incluye el Archivo Arqueológico, 2006) y la renovación o incorporación de nuevos centros patrimoniales distribuidos por barrios y distritos de Barcelona, tales como: el Monasterio de Pedralbes (vinculado al MUHBA entre 1999 y 2012), la Casa del Guarda del Parque Güell (2002), el Refugio 307 (2003), Santa Caterina (2007), MUHBA El Call (2008), Domus de Sant Honorat (2010), Turó de la Rovira (2011), y Casa de las aguas (2011).
Más allá de las exposiciones permanentes y temporales que mantiene las puertas abiertas al público, y de la conservación, investigación y difusión de su patrimonio mueble e inmueble, el MUHBA despliega sus actividades mediante otros formatos.[17]
El Centro de Investigación y Debate (CRED) mantiene una programación regular de diálogos de historia urbana y organiza coloquios, jornadas, conferencias, etc. sobre aspectos de la historia de la ciudad.[18] Así mismo, se organizan itinerarios, visitas y actividades sobre el terreno y se ofrecen a las escuelas un amplio abanico de actividades para diversos niveles educativos.
A nivel de enseñanza superior, el MUHBA colabora con diversos másteres y posgrados de las universidades de Barcelona.
La investigación sobre nuevos patrimonios se extiende con actividades relacionadas con el ámbito musical, alimentario, patrimonio oral y el patrimonio literario.
Las publicaciones del MUHBA[19] incluyen diversas colecciones de libros, guías de historia urbana en formato bolsillo y publicaciones periódicas como la revista Quarhis y Cuadernos de Arqueología e Historia de la Ciudad de Barcelona (desde 2005), continuadora de los antiguos "Cuadernos de Arqueología e Historia de la Ciudad" (1960-1980).
El MUHBA cuenta con una biblioteca especializada en historia de Barcelona y lidera una red europea de museos de ciudad que celebra regularmente reuniones de trabajo (desde 2010)
La Asociación de Amigos y Amigas del MUHBA da apoyo en muchas de sus actividades.
El Museo conserva una importante cantidad de objetos vinculados a la vida municipal, a las fiestas, a los desfiles, a las tradiciones de la ciudad de Barcelona, sus gremios, sus manufacturas, etc. Otra parte muy importante de las colecciones del MUHBA está formada por materiales procedentes de intervenciones arqueológicas, testimonios de la vida material de la ciudad, de sus orígenes.
Algunas piezas y series destacadas de las colecciones del Museo de Historia de Barcelona son:
Aparte de la colección de historia de Barcelona, el Archivo Arqueológico del MUHBA es el depósito de todo el material procedente de las intervenciones arqueológicas que se realizan en Barcelona. Así mismo, el MUHBA gestiona la colección de la Galería de Catalanes Ilustres, las colecciones verdaguerianas de Villa Joana y las piezas cedidas por la Asociación de Amigos de la Fabra y Coats relacionadas con la historia de esta fábrica del barrio de San Andrés de Palomar.
Espacios de contenido digital:
Directores del Museo de Historia de Barcelona desde su creación: