El Monte Dolmed es una gran montaña ficticia del legendarium de J. R. R. Tolkien, situada en la cadena de las Ered Luin o Montañas Azules, en la parte oriental de Beleriand durante la Primera Edad del Sol. Su nombre en sindarin significa «Cabeza Húmeda». En torno a sus laderas se encontraban las antiguas mansiones de los Enanos de Nogrod y Belegost, dos de las principales ciudades enanas de la Primera Edad. Monte Dolmed marcaba el límite entre Beleriand y las tierras de Eriador, desempeñando un papel importante como hito geográfico e histórico en la Tierra Media. Al final de la Primera Edad, la montaña desapareció tras la Guerra de la Cólera, cuando las Montañas Azules se fracturaron y gran parte de Beleriand quedó anegada bajo el mar.
Ubicación en las Montañas Azules: Monte Dolmed se alzaba en el corazón de las Ered Luin, la cordillera que separaba Beleriand (al oeste) de Eriador (al este) durante la Primera Edad. La montaña se ubicaba aproximadamente en la zona central de dicha cordillera, dominando el único paso conocido entre Eriador y Beleriand. Junto con el río Ascar, Monte Dolmed marcaba el límite septentrional de la región de Ossiriand, la “Tierra de los Siete Ríos”, habitada por los elfos verdes Laiquendi. Varios ríos nacían en sus laderas occidentales y fluían hacia el río Gelion en Beleriand, incluyendo el propio Ascar entre otros cursos menores . En las faldas orientales de Monte Dolmed se fundaron las dos grandes ciudades enanas de las Montañas Azules. Al norte de la gran cumbre se hallaba Belegost (denominada Gabilgathol en lengua khuzdul), y al sur se encontraba Nogrod (Tumunzahar en khuzdul). Estas ciudades estaban excavadas bajo las montañas y muy próximas al Dolmed, aprovechando las riquezas minerales de la cordillera. La presencia de Nogrod y Belegost convirtió a Monte Dolmed en el centro de la actividad enana en Beleriand oriental, comunicando a los Enanos con los reinos elfos vecinos. Geológicamente, se le describe como una mole prominente entre unas montañas relativamente erosionadas, lo que sugiere que era un pico de notable altura dentro de las Ered Luin.
A lo largo de la Primera Edad, Monte Dolmed fue testigo y escenario cercano de numerosos eventos de importancia en la Tierra Media. Según las tradiciones de los Enanos, bajo esta montaña despertaron dos de los siete Padres originales de los Enanos: los fundadores de los clanes conocidos como Barbas Anchas y Barbas de Fuego. Sus descendientes establecerían posteriormente las ciudades de Nogrod y Belegost en las Montañas Azules, lo que convirtió al Dolmed en cuna de la civilización enana en el noroeste de la Tierra Media. Desde sus fortalezas cercanas al Dolmed, los Enanos mantuvieron contacto con los Elfos del oeste de Beleriand. De hecho, en los albores de las guerras contra Morgoth, las fuerzas de Nogrod y Belegost acudieron en ayuda del rey elfo Thingol de Doriath. Durante la Primera Batalla de Beleriand combatieron junto a los elfos sindar y verdes, contribuyendo a la derrota y expulsión de las huestes de Morgoth del Beleriand oriental. Tras esta batalla inicial, los enanos del Dolmed emboscaron y aniquilaron a los orcos que huían hacia el norte, asegurando la paz temporal en la región. En siglos posteriores, Monte Dolmed siguió siendo un punto estratégico. Cerca de sus faldas septentrionales ocurrió el primer encuentro entre Elfos y Hombres en Beleriand: Finrod Felagund se encontró por primera vez con los Hombres Edain en las cercanías del Dolmed, cuando estos atravesaban las Montañas Azules entrando en Beleriand. Este encuentro marcó el inicio de la alianza entre los Eldar y los Edain en la Primera Edad. Durante la Guerra de las Joyas, los Enanos de las Montañas Azules participaron en eventos clave. En el año 472 P. E. tuvo lugar la Nírnaeth Arnoediad (Batalla de las Lágrimas Innumerables), en la que los ejércitos de Nogrod y Belegost lucharon junto a los elfos contra Morgoth. En esta batalla, Azaghâl, el rey de Belegost, hirió de muerte al dragón Glaurung, logrando hacer retroceder a las huestes de dragones aunque sacrificó su vida en el duelo. Los enanos de Belegost se retiraron del campo llevando el cuerpo de su rey en una solemne marcha fúnebre que ningún enemigo osó perturbar. La participación enana, proveniente de las mansiones del Dolmed, fue crucial para limitar el daño causado por los dragones de Morgoth en aquella batalla. Poco después, ocurrió un hecho trágico que involucró indirectamente al Monte Dolmed. El rey Thingol de Doriath encargó a artesanos enanos de Nogrod engarzar el Silmaril de Beren en el Nauglamír, pero la codicia desencadenó el asesinato de Thingol a manos de los enanos. Esto provocó la Ruina de Doriath (502 P. E.), tras la cual un gran ejército de Nogrod saqueó Menegroth y huyó con el Silmaril. Los enanos invasores fueron perseguidos y derrotados en Sarn Athrad por Beren y los elfos Laiquendi, y los supervivientes que lograron alcanzar las Montañas Azules encontraron su fin allí. En las laderas del Monte Dolmed, los Ents del Beleriand oriental emboscaron a los enanos que huían con el tesoro y los masacraron, vengando así la profanación de Doriath. Este acontecimiento dio origen a leyendas sobre la furia de los Ents en las Montañas Azules. Al término de la Primera Edad, durante la Guerra de la Cólera (545–587 P. E.), las fuerzas de Valinor derrotaron a Morgoth, pero la batalla final tuvo consecuencias catastróficas para la geografía de Beleriand. La inmensa convulsión de la tierra provocó que gran parte de Beleriand se hundiera bajo el mar. Las Ered Luin se quebraron precisamente en la zona de Monte Dolmed, abriéndose paso hasta allí las aguas del Belegaer (el Gran Mar) y formando el nuevo Golfo de Lhûn. Monte Dolmed quedó completamente destruido durante este cataclismo, al igual que Nogrod y otras estructuras cercanas. Con la desaparición del Dolmed y la anegación de Beleriand, las Montañas Azules quedaron partidas en dos bloques separados por el golfo, delimitando las costas del nuevo reino élfico de Lindon en la Segunda Edad.
Enanos: Monte Dolmed estuvo íntimamente ligado al pueblo de los Enanos. Fue considerado su hogar ancestral en el noroeste, dado que dos de los Padres de los Enanos habrían despertado allí. Las grandes mansiones enanas de Nogrod y Belegost prosperaron a sus pies, explotando las vetas de metales (hierro, cobre y otros) de las Montañas Azules. Los enanos de estas ciudades eran famosos artesanos y herreros; por ejemplo, Telchar de Nogrod fue el más renombrado herrero enano de la Primera Edad. Este pueblo mantenía una cultura aislada pero comerció con sus vecinos, vendiendo armas y herramientas a los elfos y hombres de Beleriand. Tras la ruina de Beleriand, los Enanos supervivientes de Nogrod y Belegost abandonaron la zona del Dolmed, migrando hacia el este. Muchos se unieron al próspero reino enano de Khazad-dûm (Moria) en las Montañas Nubladas, durante la Segunda Edad. Otros grupos menores permanecieron en las Montañas Azules durante las Edades posteriores, aunque nunca recuperaron el esplendor de antaño.
Elfos: Desde muy temprano existió contacto entre los elfos Sindar de Doriath y los Enanos de las Montañas Azules. El rey Elu Thingol acogió a emisarios enanos en Menegroth y estableció alianzas comerciales y militares con ellos. Los enanos ayudaron a Thingol en la construcción de sus palacios subterráneos y en la forja de armamento, mientras que a cambio obtenían riquezas y comercio con Beleriand. Esta relación, sin embargo, sufrió altibajos: tras la tragedia del Nauglamír y el asesinato de Thingol, los Elfos Sindar pasaron a desconfiar profundamente de los Enanos. Los elfos verdes de Ossiriand (Laiquendi), liderados por Beren, dieron caza a los enanos de Nogrod en su retirada y los aniquilaron cerca del Dolmed, como se narró anteriormente. A pesar de estos conflictos, la cooperación inicial entre Elfos y Enanos en la región del Monte Dolmed fue crucial para la defensa de Beleriand contra Morgoth en las primeras guerras.
Hombres: La zona del Monte Dolmed está ligada también a la llegada de los Primeros Hombres a Beleriand. Fue en los valles cercanos al Dolmed donde el príncipe élfico Finrod Felagund encontró a los Hombres de las tres casas de los Edain que emigraban hacia el oeste. Finrod ayudó a estos Hombres y los guio a través de las montañas, ganándose su gratitud y estableciendo una amistad duradera entre los Edain y los Eldar. Los Edain se asentaron posteriormente en las tierras de Beleriand, pero algunos clanes humanos (como los seguidores de Bór y Ulfang, orientales aliados de Morgoth) también cruzaron las Ered Luin en épocas posteriores. No obstante, la mayoría de los eventos concernientes a Hombres en la Primera Edad ocurrieron más al interior de Beleriand; Monte Dolmed principalmente figura como puerta de entrada de los Edain al reino élfico.
Ents: Si bien los Ents (pastores de árboles) no habitaron el Monte Dolmed, aparecen en la historia del lugar por su violenta intervención contra los Enanos tras el saqueo de Doriath. Los Ents de las florestas orientales, posiblemente despertados por la agitación de aquellos días, atacaron a los enanos de Nogrod que huían a través de las Montañas Azules y los aplastaron junto al Dolmed. Este hecho, singular en las crónicas de la Primera Edad, ilustra la conexión mítica entre la montaña y las criaturas más antiguas de los bosques. En la tradición élfica quedó el recuerdo de cómo la propia naturaleza, personificada en los Ents, se alzó para castigar la avaricia y sacrilegio cometidos en la sombra del Monte Dolmed
Beleriand – Región al oeste de las Montañas Azules, escenario de las guerras contra Morgoth en la Primera Edad.
Ered Luin – Las Montañas Azules, cordillera donde se hallaba el Monte Dolmed y las ciudades enanas de Nogrod y Belegost.
Nogrod – Ciudad de los Enanos Barbas de Fuego (Tumunzahar) situada al sur del Monte Dolmed.
Belegost – Ciudad de los Enanos Barbas Anchas (Gabilgathol) situada al norte del Monte Dolmed.
Enanos (Tierra Media) – Raza de hábiles mineros y herreros creada por Aulë, a la que pertenecían los pueblos de Nogrod y Belegost.
Elfos (Tierra Media) – Primera raza nacida en Arda; los elfos Sindar de Doriath tuvieron temprano contacto con los Enanos del Dolmed.
Nírnaeth Arnoediad – “Batalla de las Lágrimas Innumerables”, quinta gran batalla de Beleriand en la que participaron los Enanos de las Montañas Azules.
Guerra de la Cólera – Batalla final contra Morgoth; su desenlace provocó la destrucción de Monte Dolmed y la caída de Nogrod y Belegost.