Marcelina Elexgaray Arrospide

Summary

Marcelina Elexgaray Arrospide (Busturia, 26 de abril de 1877-Bilbao, 15 de noviembre de 1962) fue una cocinera y hostelera vasca. Regentó el restaurante La Busturiana en el barrio de San Francisco de Bilbao.

Marcelina Elexgaray Arrospide
Información personal
Nombre en euskera Martzelina Elexgarai Arrospide Ver y modificar los datos en Wikidata
Nacimiento 26 de abril de 1877 Ver y modificar los datos en Wikidata
Busturia (España) Ver y modificar los datos en Wikidata
Fallecimiento 15 de noviembre de 1962 Ver y modificar los datos en Wikidata (85 años)
Bilbao (España) Ver y modificar los datos en Wikidata
Información profesional
Ocupación Cocinera Ver y modificar los datos en Wikidata

Biografía

editar

Marcelina nació en el municipio de Busturia, en el caserío Etxebarriatze, el 26 de abril de 1877,[1]​ hija de Eulogio Elexgaray y Antonia Florencia Arróspide. En lo que respecta al apellido paterno, algunas fuentes lo recogen también como Elesgaray o Elezgaray.[1][2][3]​En este artículo se ha respetado la grafía que aparece en el registro de bautismo.[4]

Siendo joven se trasladó a Bilbao, y trabajó como sirvienta en un local de la calle Arbolantxa que daba comidas para los trabajadores de la zona cercana de los muelles de Uribitarte, marinos, trabajadores de los almacenes y cargueras, donde adquirió experiencia en la cocina.[1][5][2][6][7]

En Bilbao conoció al que sería su marido, Secundino Amezua Oregui, natural de Garay, que era hijo de Juan Amezua y Bibiana Oregui y fue bautizado el uno de junio de 1872. Según el padrón de 1895, Secundino vivía en la calle del Cristo, era jornalero y analfabeto.[1][2]​En el caso de Secundino, también se da un problema con el nombre, al aparecer en múltiples ocasiones, sobre todo en los trámites municipales, como Segundo Amezua.[8]​Marcelina y Secundino contrajeron matrimonio el 18 de agosto de 1900 en Begoña. La pareja tuvo nueve hijos e hijas:[1]​ Nicolás, Félix, Felisa, Florentina, Felipe, Lorenzo, Benito, Segundo y María.[2]

Fallecimiento

editar

Marcelina Elexgaray Arróspide, falleció en su casa de la calle Hernani el 15 de noviembre de 1962, con 85 años de edad. Su esposo Secundino había fallecido mucho antes, el siete de noviembre de 1933 a la edad de sesenta y un años.[1][2]

La Busturiana en la calle Hernani

editar
 
Antoia Elexgaray, sobrina de Marcelina, en la cocina de La Busturiana

Taberna de Hernani 3

editar

Pareja emprendedora, al mismo tiempo que hacían los planes de matrimonio comenzaron a planificar la industria que sería el sustento de la nueva familia. El año anterior a la boda, en 1899, Secundino Amezua tramitó en el ayuntamiento una solicitud de autorización para tomar en traspaso una taberna que Juan Unamuno tenía abierta en el número tres de la calle Hernani.[9]

Si bien todas las fuentes consultadas están de acuerdo en que el primer negocio de "La Busturiana" estuvo situado en la calle Hernani, algunas lo sitúan en el número 1,[1][3][7]​mientras que la documentación municipal sitúa el local en el número tres. Sobre el objeto de este primer negocio tampoco hay acuerdo. Lo que para unos era un ultramarinos,[3]​para otros era una casa de comidas,[1][7]​o incluso un restaurante.[6]​Posiblemente lo fuese todo a la vez, pero en cambio el ayuntamiento de Bilbao tenía muy claro, como se ve a continuación, el sistema de clasificación del negocio y sus diferentes categorías.

Este primer negocio de La Busturiana, nombre que se mantuvo constante a pesar de los cambios de ubicación,[3]​ duró unos pocos años, dado que en 1904 Secundino solicitó al ayuntamiento permiso para el traslado de la taberna establecida en la calle Hernani número tres a otro local en el número nueve de la misma calle.[10]

Taberna de Hernani 9, La Busturiana

editar

Todo el proceso de cambio se llevó a cabo entre 1904 y 1905. De nuevo, fue Secundino quien solicitó el permiso para la colocación de un rótulo anunciador con la inscripción «La Busturiana» en la fachada de la taberna de la calle Hernani número nueve.[8]​De hecho, será Secundino Amezua quien conste en todos los trámites oficiales. En 1907 parece que el negocio prospera, ya que se solicitó el cambio a primera categoría para su taberna, que era de segunda.[11]​En 1913, renovaron el rótulo que tenían instalado.[12]​En 1919 volvieron a solicitar la clasificación de taberna de primera categoría, por lo que se deduce que su solicitud de 1907 no debió de ser aprobada.[13]

Restaurante La Busturiana de Hernani 9

editar

Las cosas siguieron yendo bien en La Busturiana. El año 1920 la solicitud de nueva clasificación que tramitaron fue de restaurante de tercera categoría para su, todavía, taberna,[14]​y encontramos que la respuesta municipal fue positiva, ya que al año siguiente, en 1921, solicitaron permiso para colocar un foco eléctrico en la puerta de entrada del, ya si, Restaurante La Busturiana.[15]

Las siguientes obras de las que tenemos conocimiento son las de un negocio asentado y en franca expansión. Entre 1924 y 1925 solicitan permiso para ejecutar obras de reforma en la planta baja de la casa de la calle Hernani número nueve, que era de su propiedad, con objeto de habilitar un restaurante, un almacén de bacalaos y una tienda de ultramarinos, con planos y un proyecto del arquitecto Ángel Líbano de 1925.[16]

La fama

editar

Durante el siglo XIX y principios del siglo XX se extendió la costumbre de crear sociedades, clubs, conocidos localmente como cuarteles y más modernamente como txokos, entre la buena sociedad bilbaína. También el gran despegue económico de Bilbao en esta época generó una cultura del restaurante que La Busturiana supo aprovechar, organizando y consolidando un restaurante de categoría. Estas sociedades eran lugares de encuentro masculinos para el ocio y la socialización, que encargaban de fuera la comida que fuesen a consumir. La cercanía entre una de las más importantes de Bilbao, la Sociedad Bilbaína, creada por la burguesía local en 1839, y que tuvo su primera sede social en la plaza Nueva, y el gran nivel de cocina del bacalao de La Busturiana, hizo que la fama de esta se extendiese.[17]

La época de gloria del restaurante se dio entre 1915 y su cierre en 1927, especialmente durante los años cercanos a la Primera Guerra mundial.[7]​ Marcelina adquirió el edificio del número 9 de la calle Hernani, que constaba de cinco pisos, con el domicilio en el 3º piso[2]​e instalando los comedores en la primera planta.[18]

La importancia del bacalao

editar

La pesca y el consumo del bacalao es parte de la historia del País Vasco, y están documentadas las expediciones vascas a la pesca del bacalao desde por lo menos el siglo XV.[19]​ No es de extrañar, pues, que el término castellano bacalao, según la RAE, proceda del euskera.[20]

El restaurante La Busturiana estuvo especializado en la cocina del bacalao en salazón, hecho a la vizcaína,[21]​ en salsa verde o al pil-pil, las elaboraciones tradicionales de la cocina vasca,[22]​ y con una receta propia, el bacalao a la busturiana, que se hizo famosa.[17]

Envío a domicilio

editar
 
Cestas para el envío de los pedidos por ferrocarril

La fama del bacalao de Marcelina rompió fronteras. Su producto, desbordando la zona metropolitana de la ría del Ibaizabal, llegaba a cualquier ciudad de la península ibérica e incluso a las capitales francesa y española. Las residencias reales de la zona, como el palacio de Miramar o el de la Magdalena, estaban en su lista de clientes.[22]

Marcelina colocaba dentro de unas cestas las cazuelas del bacalao guisado que había elaborado en el barrio de San Francisco, para que llegaran en ferrocarril a sus destinos.[3]

El problema del año 30

editar

En la revista Vida Vasca, número siete, del año 1930, página 87[23][24]​se publicó un artículo firmado por Eduardo López del Olmo que se titulaba Crónica Humorística,el Bacalao a la Vizcaína y decía así:

"(...) todo lo bueno se mixtifica o se falsifica porque la codicia de los hombres no perdona (...) no hace mucho tiempo que en un restaurant, que ya no existe, el bacalao a la vizcaína,ya fuera en salsa roja,ya al pir-pir había alcanzado gran fama y allí acudían los aficionados a tan rico manjar (...) Un buen día (...) se le ocurrió al inspector de sanidad visitar el afamado restaurant.(...) Destapó calderos y cacerolas, y encontró el bacalao de inferior calidad puesto a remojo con sosa. (y) un compuesto de goma laca con una materia colorante (...) y pasara por el de de mejor clase.(...)"

  • En mayo de 1930, Secundino Amézua respondió a lo que consideró calumnias sobre su establecimiento por medio de un artículo en el Noticiero Bilbaíno, que se titulaba ¡Cortando el paso a la calumnia!

"Desde hace algún tiempo corre el rumor (...) que en el establecimiento de mi propiedad titulado la Busturiana, se confeccionaban los platos de bacalao, que al público se servían, utilizando ingredientes atentatorios a la salud; y se hacía depender el cierre de mi antiguo restaurant de esta causa (...) Me interesa cortar este rumor calumnioso para mi honorabilidad personal (...)"[25]

La tienda de bacalao La Busturiana

editar

Cierre del restaurante

editar

Si partir de 1925 regentaban, además del restaurante, el almacén de bacalaos y la tienda de ultramarinos,[16]​ el primero de julio de 1927 se cerró el restaurante, al tiempo que se mantuvieron el comercio de ultramarinos y venta de bacalao, así como el servicio a domicilio de encargos de bacalao "condimentado".[26]

Negocio de transmisión familiar

El orden de transmisión del negocio de La Busturiana fue el siguiente: tras Marcelina se hizo cargo su hijo Lorenzo Amezua Elexgaray, después lo cogió su hermano Benito que, posteriormente, se lo dejó a su hija Begoña Amezua, que al retirarse en el 2001 acabó con la trasmisión familiar,[1]​ y por último Pío González, su último propietario. Trabajador de la empresa durante treinta años,[3]​entró con veinte como repartidor, llevando los pedidos de bacalao por bares y domicilios. En esos tiempos trabajaban en la tienda cinco personas, dos para cortar y dos para servir, además del repartidor. Años después, ocupó el puesto de cortador, hasta que en el año 2001 se hizo cargo del comercio.[27]

 
Antiguo local de La Busturiana en Hernani 9

Cierre de La Busturiana

editar

La Busturiana cerró sus puertas definitivamente en 2014. Pío González y Mari López, el matrimonio propietario del histórico comercio, decidieron cerrar el negocio después de trece años, ante la escasez de clientes. Los cambios de costumbres acabaron con una tienda que durante muchos años fue referencial en la venta de bacalao.[27]

El bacalao a la Busturiana

editar

La especial forma en que Marcelina cocinaba el bacalao (sin profundizar en si es técnicamente bacalao al pil-pil, bacalao ligado o bacalao ligado a la busturiana[5]​) generó la necesidad de poner nombre a aquel guiso que estuvieron a punto de nombrar como bacalao a la bilbaína. Pero Marcelina defendió que debía ser a la busturiana gentilicio con el que la gente la conocía, en memoria de su pueblo natal.[17][7][28]

Receta recogida por K-Toño[29]​ Frade Villar:

editar

Se parte el bacalao en tajadas y se ponen a remojo desde el mediodía de hoy hasta el mediodía del día siguiente, cambiando el agua a la noche y a las ocho de la mañana. A media mañana se sacan las tajadas y se des-escaman (cuando estén a remojo hay que procurar que tengan la piel hacia arriba). En una cazuela aparte se pone agua a calentar, se introducen las tajadas y antes del minuto se sacan de nuevo y se les quitan las espinas. En una sartén se ponen a freír bastantes ajos, se retiran una vez dorados, se echa el aceite en una cazuela de barro y se ponen las tajadas de bacalao junto con unas “arbejillas” y perejil picadito. Se ponen en un plato sopero dos yemas de huevo con pan rayado, se le añade caldo de gallina y se pasa por un colador echándolo a la cazuela hasta que cuajen las tajadas. Se añaden unas setitas o champiñones, se fríe un poquito y se coloca en la cazuela con unos esparraguitos de adorno, se calienta la cazuela a la hora de comer y... ¡Listo!.[6]

Véase también

editar

Referencias

editar
  1. a b c d e f g h i Agirreazkuenaga Zigorraga, 2020, p. 129.
  2. a b c d e f «LAS BACALADAS DE GREGORIO MARTÍN,LA BUSTURIANA Y LA PYSBE». LAS BACALADAS DE GREGORIO MARTÍN,LA BUSTURIANA Y LA PYSBE. Consultado el 4 de mayo de 2025. 
  3. a b c d e f Sacristán, Cristina M. (14 de abril de 2014). El bacalao de La Busturiana, el más viajero. Consultado el 4 de mayo de 2025. 
  4. «SIGA-AKIS .:. AHEB-BEHA». www.internet.aheb-beha.org. Consultado el 6 de mayo de 2025. 
  5. a b Arlucea, Ana Vega Pérez de (13 de marzo de 2025). «Las penurias de las cargueras de bacalao en la ría de Bilbao». El Correo. Consultado el 4 de mayo de 2025. 
  6. a b c Frade Villar, K.-Toño (14 de abril de 2014). La Busturiana'. Consultado el 4 de mayo de 2025. 
  7. a b c d e Mujika, Por Jon (11 de enero de 2020). «La fortaleza de La Busturiana». Deia. Consultado el 5 de mayo de 2025. 
  8. a b «AHFB. Sección MUNICIPAL Fondo ARCHIVO MUNICIPAL DE BILBAO Signatura BILBAO QUINTA 0409/041 Fechas 1904 / 1905». 
  9. «AHFB. Sección MUNICIPAL Fondo ARCHIVO MUNICIPAL DE BILBAO Signatura BILBAO CUARTA 0406/028 Fechas 1899». 
  10. «AHFB. Sección MUNICIPAL Fondo ARCHIVO MUNICIPAL DE BILBAO Signatura BILBAO QUINTA 0414/042 Fechas 1904 / 1905». 
  11. «AHFB. Sección MUNICIPAL Fondo ARCHIVO MUNICIPAL DE BILBAO Signatura BILBAO QUINTA 0546/035 Fechas 1907». 
  12. «AHFB. Sección MUNICIPAL Fondo ARCHIVO MUNICIPAL DE BILBAO Signatura BILBAO PRIMERA 0629/001 Fechas 1913 / 1914». 
  13. «AHFB. Sección MUNICIPAL Fondo ARCHIVO MUNICIPAL DE BILBAO Signatura BILBAO SEXTA 0094/012 Fechas 1919». 
  14. «AHFB. Sección MUNICIPAL Fondo ARCHIVO MUNICIPAL DE BILBAO Signatura BILBAO SEXTA 0107/049 Fechas 1920». 
  15. «AHFB. Sección MUNICIPAL Fondo ARCHIVO MUNICIPAL DE BILBAO Signatura BILBAO SEXTA 0183/460 Fechas 1921 / 1922». 
  16. a b «AHFB. Sección MUNICIPAL Fondo ARCHIVO MUNICIPAL DE BILBAO Signatura BILBAO FOMENTO 0163/901 Fechas 1924 / 1925». 
  17. a b c Agirreazkuenaga Zigorraga, 2020, pp. 129-132.
  18. Agirreazkuenaga Zigorraga, 2020, p. 133.
  19. PUERTA, IÑIGO (24 de enero de 2015). «Bacalao, el oro vasco». El Diario Vasco. Consultado el 8 de mayo de 2025. 
  20. ASALE, RAE-. «bacalao | Diccionario de la lengua española». «Diccionario de la lengua española» - Edición del Tricentenario. Consultado el 8 de mayo de 2025. 
  21. Añibarro, 1930.
  22. a b Agirreazkuenaga Zigorraga, 2020, p. 134.
  23. Uhide, Miguel Los Santos. «Revista VIDA VASCA 1924/1930». Miguel Los Santos Uhide - Mis cosas. Consultado el 4 de mayo de 2025. 
  24. «1930 Revista Vida Vasca.pdf». Google Docs. Consultado el 4 de mayo de 2025. 
  25. Amezua, Secundino (16 de mayo de 1930). «¡Cortando el paso a la calumnia!». El Noticiero bilbaíno: 2. 
  26. «El Liberal». Bilbao. 19 de junio de 1927. 
  27. a b Basurto, Un reportaje de José (14 de abril de 2014). «La Busturiana deja de cortar el bacalao en Bilbao». Deia. Consultado el 4 de mayo de 2025. 
  28. «Bacalao a la busturiana. El busilis del buen bacalao». Urdaibai magazine: 28-29. 28 de diciembre de 2021. 
  29. «Fallece K-Toño Frade a los 73 años de edad». Deia. 12 de noviembre de 2018. Consultado el 7 de mayo de 2025. 

Bibliografía

editar
  • Agirreazkuenaga Zigorraga, Joseba (2020). «Marcelina Elesgaray Arrozpide». Mujeres de vanguardia en Bilbao (1800-1936) ;Joseba Agirreazkuenaga, Mikel Urquijo y María José Villa (eds.). Bilbao: Universidad del País Vasco = Euskal Herriko Unibertsitatea. pp. 128-134. ISBN 978-84-1319-171-3. 
  • Añibarro, Victor R. (20 de diciembre de 1930). «En Bilbao hay un restaurante que guisa el bacalao». Estampa (154): 25. 

Enlaces externos

editar
  • Fondo fotográfico de Eusko Ikaskuntza
  •   Datos: Q134369683