Mabel Purefoy Fitzgerald (Preston Candover, 3 de agosto de 1872 – Oxford, 24 de agosto de 1973) fue una fisióloga británica y patóloga clínica conocida por su trabajo sobre la fisiología de la respiración.[1] Se convirtió en la segunda mujer miembro de la Sociedad Americana de Fisiología en 1913.[2]
Mabel Purefoy FitzGerald | ||
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Información personal | ||
Nacimiento |
3 de agosto de 1872 Preston Candover (Reino Unido) | |
Fallecimiento |
24 de agosto de 1973 Oxford (Reino Unido) | (101 años)|
Educación | ||
Educada en | ||
Información profesional | ||
Ocupación | Fisióloga | |
Área | Fisiología | |
Mabel Fitzgerald nació en 1872 en Preston Candover cerca de Basingstoke. Fue educada en casa, algo típico de la clase alta y media femenina en su época. En 1895 fallecieron sus padres y Mabel se mudó a Oxford con sus hermanas en 1896.[1] Comenzó de manera autodidacta el aprendizaje de química y biología a partir de libros, además de asistir a clases en la Universidad de Oxford entre 1896 y 1899, a pesar de que entonces las mujeres no podían graduarse. Continuó sus estudios en la Universidad de Copenhague, la Universidad de Cambridge y la Universidad de Nueva York.[3]
Fitzgerald empezó para trabajar con Francis Gotch en el departamento de fisiología en Oxford. Gotch contribuyó a que la Royal Society publicara un artículo de Fitzgerald en 1906.[3] Desde 1904, Fitzgerald trabajó con John Scott Haldane midiendo la tensión del dióxido de carbono en el pulmón humano. Después de estudiar las diferencias entre personas sanas y enfermas, ambos continuaron investigando los efectos de la altitud en la respiración; trabajo por el que son más conocidos. Las observaciones de Fitzgerald sobre los efectos de aclimatación en altura de la tensión de dióxido de carbono y hemoglobina siguen siendo aceptados hoy en día.[1]
En 1907, Fitzgerald obtuvo una beca de movilidad Rockefeller, gracias a la cual pudo trabajar en Nueva York y Toronto.[3] En 1911 participó, junto con C. Gordon Douglas y muchos otros científicos, en una expedición a Colorado dirigida por John Scott Haldane para investigar la respiración humana en altas altitudes.[4] En el verano de 1913 en Carolina del Norte, realizó mediciones en la respiración y la sangre de un total de 43 residentes adultos seleccionados de tres ubicaciones diferentes en la cadena sur de los Apalaches.[5]
Fitzgerald regresó al Reino Unido en 1915 para trabajar como patóloga clínica en la enfermería de Edimburgo, vacante debido a la Primera Guerra Mundial. No publicó más artículos y se mantuvo al margen de la comunidad de fisiología, incluso tras su regreso a Oxford en 1930.[3] En 1961, en el centenario del nacimiento de Haldane, su trabajo fue redescubierto. En 1972, a los 100 años de edad, recibió un grado universitario honorífico de la Universidad de Oxford, 75 años después de que haber asistido a clases allí.[6][7] También fue nombrada miembro de la Sociedad de Fisiología.[1]
Sus publicaciones (Nachlass) se encuentran en la Biblioteca Bodleian.[8]