La araña violinista de Bonet (Loxosceles boneti)[1] es una especie de araña del género Loxosceles, perteneciente a la familia Sicariidae, del orden Araneae. Esta especie fue descrita por Gertsch en 1958. El nombre específico boneti es en honor al doctor Federico Bonet, biólogo, naturalista y profesor en la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB), ubicada en México.[2]
Loxosceles boneti | ||
---|---|---|
Taxonomía | ||
Reino: | Animalia | |
Filo: | Arthropoda | |
Subfilo: | Chelicerata | |
Clase: | Arachnida | |
Orden: | Araneae | |
Suborden: | Araneomorphae | |
Familia: | Sicariidae | |
Género: | Loxosceles | |
Especie: |
Loxosceles boneti Gertsch, 1958. | |
Su coloración es muy similar a la presentada por la especie Loxosceles reclusa. El carapacho es mayormente marrón, incluida la mancha del “violín”, se notan manchas amarillentas centrales lo que confiere a los lados una forma de banda ancha, dentada, marrón y marginal. La forma general del cuerpo es típica de las arañas violinistas, patas delgadas, acomodadas a los lados, sin espinas evidentes, el color del opistosoma es marrón: el arreglo ocular es 2:2:2. Podemos diferenciar a esta especie de otras del género Loxosceles por presentar los tubérculos oculares más juntos. Es una especie de talla mediana, llegando a alcanzar 5 centímetros contando las patas.[2]
Esta especie endémica se distribuye en México, en los estados de Guerrero, Morelos y Puebla.[2][3]
Estas arañas de ambiente terrestre pueden encontrarse debajo de piedras o en grietas.[2] Se ha observado que pueden habitar dentro de casas.[4][5]
No se encuentra dentro de ninguna categoría de riesgo en las normas nacionales o internacionales.
Esta especie se encuentra dentro de los organismos considerados de importancia médica. Su mordedura puede llegar a representar un riesgo grave a la salud y requiere atención médica.[6]