Ley antitabaco de Costa Rica, en marzo de 2012, Costa Rica aprobó una de las más estrictas normas sobre el fumado en el mundo por un votación de 45-2 votos a favor. Esta legislación ha prohibido el fumado en autobuses, taxis, trenes y sus terminales, sitios de trabajo, edificios públicos, restaurantes, bares, casinos y todos los edificios de acceso público cerrados, sin excepciones (no se permiten “áreas para fumadores" separadas). También prohíbe fumar en áreas recreativas o educativas exteriores como parques, estadios y campus universitarios. La ley requiere que los paquetes de cigarrillos muestren advertencias de texto y foto en al menos el 50 por ciento del embalaje.[1]
Se introdujo un impuesto de veinte colónes por cigarrillo y se prohíbe cualquier forma de publicidad de tabaco, el uso de términos engañosos como "liviano" o "suave" y la venta de paquetes pequeños o cigarrillos individuales (fijando un mínimo de 20 cigarrillos por paquete). Los infractores serán multados con un mínimo de 180.000 colones (US $ 355). El cumplimiento de la ley ha sido sorprendentemente alto y el hábito de fumar ha desaparecido en áreas prohibidas. El gobierno y las instituciones privadas han iniciado varios programas y campañas de promoción para promover el abandono del hábito de fumar, con resultados muy positivos.