La Cafetera Voladora fue un programa infantil transmitido por Televisión Nacional de Chile (TVN) entre los años 1978 y 1982, junto con la llegada de la televisión en color a ese país. Los libretos eran escritos por Patricia Scantlebury, quien por esos años además estaba encargada del informe meteorológico en el canal estatal chileno.
La cafetera voladora | ||
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Serie de televisión | ||
Género | Infantil | |
Presentado por | Patricia Undurraga | |
Protagonistas |
Patricia Undurraga Raúl Alarcón Willy Benítez Patricio Tores | |
Voces de | Patricio Torres | |
País de origen |
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Idioma(s) original(es) | Español | |
Lanzamiento | ||
Medio de difusión | TVN | |
Primera emisión | 1978 | |
Última emisión | 1982 | |
El show, dirigido por René Schneider, era protagonizado por Patricia Undurraga, quien se había hecho famosa entre el público infantil como la Tía Patricia del programa Ya somos amigos, también en TVN, y los actores Raúl Alarcón (más conocido como Florcita Motuda, conductor del vehículo volador), Willy Benítez (como el Buzón Preguntón), Patricio Torres (como el Guardián de los Espejos) y la actriz Francisca Inostroza (como "la pobre niñita pobre").[1]
El formato del programa, casi de corte experimental, utilizó técnicas audiovisuales que aprovechaban la recientemente inaugurada transmisión televisiva en color, aunque también aplicaba efectos especiales artesanales, hechos con papel y lápices. La trama comenzaba con El Guardián de los Espejos (Patricio Torres) contando una historia y los niños, junto a Florcita Motuda, emprendiendo viaje en la Cafetera hasta el "planeta de las imágenes", mientras se proyectaba una secuencia de imágenes de fondo. La escenografía incluía una amplia gama cromática, y la propia Cafetera Voladora estaba pintada de rojo, con franjas verdes y amarillas.[2]
El programa no cumplía una función particularmente educativa (carecía de un guión estructurado). Más bien buscaba explorar mundos oníricos y ser reflejo de las ensoñaciones infantiles. Esta propuesta, que para la época resultaba transgresora e innovadora —y que hoy lo ha convertido en material "de culto"— selló la suerte del programa, considerado a menudo incomprensible,[3] por lo que fue cancelado en 1982.