Las kokeshi (こけし en japonés) son muñecas artesanales y tradicionales japonesas. Son originarias de la región de Tohoku en el norte de Japón y se caracterizan por tener un tronco simple y una cabeza redondeada pintadas a mano con líneas sencillas para definir el rostro. El cuerpo tiene diseños ornamentales florales y no poseen brazos ni tampoco piernas.[1] La parte inferior generalmente está marcada con la firma o sello del artesano.[2] Se fabrican a mano utilizando como materia prima madera de árboles frutales como el mizuki o cerezo.[3][4]
Existe una teoría que afirma que el significado de la palabra es niño muerto, basándose en que podría ser una variación de una forma distinta de ko (niño) y kesu (librarse).[5]
Otra teoría, más aceptada, señala que el nombre sólo indica el material y la forma de las muñecas, y que la referencia a los niños muertos, niños inertes es un error surgido de la confusión entre los hiragana ko y keshi con los kanji 子 y 消 し.[6]
Los caracteres hiragana (こけし) se acordaron en la Exhibición Japonesa de Kokeshi (全国こけし大会) que tuvo lugar en Naruko en 1939.[7]
El origen real de las kokeshis son chinas.
Las formas y patrones de estas muñecas son particulares de cada zona y han pasado de maestro a aprendiz durante años. Hay once tipos de kokeshi tradicionales (伝統こけし dentō-kokeshi), agrupadas aquí según su origen:[8]
Existen también las llamadas kokeshi creativas (新型こけし, kokeshi-shingata o kokeshi-sosaku) donde el artesano tiene libertad creativa en cuanto a formas, colores y diseño. Este tipo es relativamente nuevo y fueron desarrolladas después de la Segunda Guerra Mundial.[1][9]
Se pueden enunciar muchas muñecas tradicionales, pero se reomienda la lectura del artículo principal, Muñeco tradicional japonés: