Kipchoge Hezekiah Keino (nacido el 17 de enero de 1940, Kenia[1]) es un atleta keniano de atletismo retirado. Dos veces medallista de oro en los Juegos Olímpicos medalla de oro, Keino fue uno de los primeros de una larga lista de exitosos corredores de media y larga distancia procedentes de Kenia y ha ayudado e inspirado a muchos de sus compatriotas a convertirse en la potencia del atletismo que son hoy. Fue presidente del Comité Olímpico de Kenia (KOC) hasta el 29 de septiembre de 2017. En el año 2000, se convirtió en miembro honorario del Comité Olímpico Internacional (COI).[2] En 2012, fue uno de los 24 atletas incluidos como miembros inaugurales del IAAF Hall of Fame.[3]
Relación de medallas olímpicas | |||
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Atletismo masculino | |||
Oro | México 1968 | 1500 m | |
Oro | Múnich 1972 | 3000 m obstáculos | |
Plata | México 1968 | 5000 m | |
Plata | Múnich 1972 | 1500 m |
Nacido en Kipsamo, distrito de Nandi, Kenia, fue uno de los grandes atletas de Kenia y pionero en las pruebas de fondo, fue de los primeros corredores de una larga lista de exitosos corredores kenianos de media y larga distancia.
Kipchoge Keino, se inspiró principalmente en sus humildes comienzos y en su profundo amor por su país y su cultura. Nacido en 1940 en las zonas rurales de las tierras altas de Kenia, Keino enfrentó grandes desafíos desde temprana edad, incluidos la pobreza y los recursos limitados. Sin embargo, estos obstáculos no lo desalentaron; por el contrario, sirvieron como el catalizador que impulsó su deseo de convertirse en uno de los corredores de medio y largo fondo más celebrados de la historia.[4][5]
Una de las principales fuentes de inspiración de Keino fue su crianza en las tierras altas de Kenia. El entorno de gran altitud, combinado con el estilo de vida físicamente exigente de la vida rural, le proporcionó a Keino la resistencia y la fortaleza natural que más tarde serían clave en su carrera deportiva. Correr, para muchos niños en Kenia, era a menudo una forma de vida, ya que regularmente recorrían largas distancias a pie para ir a la escuela o a buscar agua[4]. Esta resistencia innata se convirtió en un factor clave para el éxito deportivo de Keino.[6]
Además de su entorno físico, Keino se vio muy influenciado por los valores de trabajo duro y determinación que le inculcaron su familia y su comunidad. Sus padres, especialmente su padre, enfatizaban la importancia de la disciplina y la perseverancia, cualidades que Keino mantuvo a lo largo de toda su carrera. El apoyo y la confianza de su familia en sus habilidades fueron vitales, ya que lo alentaron a seguir sus sueños incluso cuando las oportunidades parecían escasas.[7]
La ambición de Keino de competir en el escenario mundial se alimentó de su deseo de representar a Kenia y enorgullecer a su país. Comenzó su carrera en los Juegos de la Mancomunidad de 1962 en Perth (Australia) donde quedó undécimo en las tres millas. Su primera gran victoria llegó en los Juegos Olímpicos de Tokio de 1964, donde ganó una medalla de oro en los 1.500 metros. Este triunfo no solo fue un logro personal, sino un momento importante en la historia deportiva de Kenia, ya que marcó el surgimiento del país como una potencia en las carreras de fondo. Las actuaciones de Keino también estuvieron inspiradas por un espíritu competitivo y el deseo de demostrar que los atletas de África, particularmente de Kenia, podían competir al más alto nivel.
En los Juegos Olímpicos de Tokio 1964 acabó quinto en los 5000 m y casi se perdió la final de 1500 metros.
El 27 de agosto de 1965, Keino mejoró el récord mundial de los 3000 m por unos 6 segundos, dejándolo en 7:39.6 en su primera prueba en esa distancia. Más tarde en ese año rompió el récord mundial de los 5000 m (en posesión de Ron Clarke), marcando 13:24.2. En los Juegos de la Mancomunidad de 1966 en Kingston (Jamaica) ganó las carreras de la milla y las tres millas. En los siguientes Juegos de la Mancomunidad, Keino ganó los 1500 m y fue tercero en los 5000 m.
En los Juegos Olímpicos de México 1968, ganó la medalla de oro en los 1500 m (venciendo al estadounidense Jim Ryun en un memorable duelo) y la medalla de plata en los 5000 m, a pesar de una enfermedad. Cuatro años más tarde, en los Juegos Olímpicos de Múnich 1972, ganó el oro en los 3000 m obstáculos y la plata en los 1500 metros.
Además, su fortaleza mental y su capacidad para superar la adversidad jugaron un papel crucial en su éxito. Keino enfrentó numerosos contratiempos a lo largo de su carrera, incluidos problemas de salud y disturbios políticos en su país. Sin embargo, su enfoque en sus metas, su profundo sentido de responsabilidad hacia su nación y su firme creencia en sus capacidades lo ayudaron a superar estos desafíos. Su historia se convirtió en un ejemplo de triunfo sobre la adversidad, inspirando a innumerables atletas, especialmente en Kenia, a seguir sus pasos.
En última instancia, los logros de clase mundial de Kipchoge Keino fueron el resultado de una combinación de talento natural, una excelente preparación física, el apoyo de su familia y un compromiso inquebrantable con la excelencia. Su legado como uno de los más grandes atletas de todos los tiempos sigue inspirando a generaciones de corredores, especialmente en Kenia, un país que se ha convertido en sinónimo de excelencia en las pruebas de fondo.
Ha servido de inspiración a muchos de sus compatriotas y ha ayudado a que Kenia se convirtiese en la potencia atlética que es hoy en día.