El Informe Social es el dictamen técnico que sirve de instrumento documental que elabora y firma con carácter exclusivo un trabajador social o trabajadora social.
En Chile, existe una única ley de Trabajo Social la Ley 20.054 (2005),[1] que regula la exclusividad universitaria de la carrera y diversas leyes que abarcan ámbitos como la salud, niñez y la inclusión, donde los Trabajadores sociales cumplen un rol fundamental. Diversas normativas regulan el ejercicio profesional, la formación, la ética y los derechos de los trabajadores sociales y las personas con quienes interactúan.
En Venezuela según la Ley de Ejercicio del Trabajo Social publicada en gaceta oficial N.º 39.020 los trabajadores sociales y las trabajadoras sociales son los únicos facultados, junto con los educadores sociales para elaborar y firmar los informes sociales, aunque esta misma ley establece que para el ejercicio del trabajo social se requiere ser, Licenciado o Licenciada en Trabajo Social, Profesional Universitario en Gestión Social para el Desarrollo Local, o Técnico/a Superior Universitario/a en Trabajo Social.
Su contenido se deriva del estudio, a través de la observación, la entrevista y otras técnicas de evaluación, donde queda reflejada en síntesis la situación objeto, valoración, un dictamen técnico (diagnóstico) y una propuesta de intervención profesional.
Consiste en la recopilación de antecedentes personales (Historia Familiar), familiares de apoyo (red de apoyo primario), dinámica familiar, evaluación económica, situación sanitaria y educativa, así como otros que sean relevantes para describir y acreditar la situación actual de un grupo familiar en particular.
Las tres partes del informe social son las siguientes:
1- Estudio psicosocial. Se indican únicamente los datos objetivos, no valoraciones del Trabajador Social, estás se realizarán más adelante.
Tales datos han sido: -Observados directamente por el Trabajador Social. -Expresados por el/los usuarios, en cuyo caso se explicita que la fuente de información es el usuario. -Avalados por documentos: nóminas, certificados, informes médicos... -Transmitidos por otros profesionales de los servicios sociales, de salud, educación.. En tal caso se indicará la fuente de información.
2- Interpretación y valoración de la situación. Es aquí donde corresponde interrelacionar, interpretar y valorar los datos expuestos en el estudio, para ello hay que señalar: -El problema. -Las causas. -Las consecuencias derivadas del problema y las personas afectadas. -Los posibles riesgos futuros de continuar el problema. -Las potencialidades y recursos detectados en las personas y en la situación. En la valoración de la situación el profesional indica su dictamen, sobre la base de su formación. Es en este apartado donde es posible que difiramos del dictamen de otros profesionales.
3- Plan de actuación Se articulará por núcleos de intervención, si es preciso intervenir en más de un área: vivienda, económico-laboral, salud...Priorizando los núcleos de intervención y objetivos de mayor a menor importancia. Señalaremos los objetivos generales y específicos y los temporalizaremos. Por último, se señalan las intervenciones concretas.
Dentro de un Informe Social se debe considerar los siguientes pasos: -Identificación del grupo familiar. -Antecedentes habitacionales. -Antecedentes de salud. -Antecedentes de la situación actual. -Opinión profesional.
En Chile no existe regulación sobre el Informe Social, sin embargo, se puede definir como:[2]
...el informe social se mantiene como un documento característico e identitario de la disciplina, el cual, además, permite plasmar y transmitir de forma detallada la o las situaciones que suceden temporalmente en un contexto social en sí mismo dinámico. Debido a esto, el rol del o la profesional es clave para comprender y plasmar, en un documento ejecutivo y riguroso, lo observado a nivel documental, científico y empírico.Milton Contreras Sáez
Por otra parte Mendes conceptualiza el informe social como:[3]
Documento privativo de Trabajo Social que establece la situación social, económica y familiar del cliente y su grupo nuclear, o aquel grupo de referencia que hace las veces de familia de origen, que se elabora con algún propósito definido y que tiene la característica de consignar en él los juicios que la situación de las personas le merecen al Trabajador Social