Habla apresurada

Summary

El habla apresurada (también conocida como "presión del habla") es un tipo de habla rápida y frenética (es decir, principalmente sin pausas), que incluye algunas irregularidades en el volumen y el ritmo o ciertos grados de circunstancialidad; es difícil de interpretar y expresa una sensación/afecto de urgencia.[1][2]​ Es principalmente un síntoma neuropsicológico de trastornos mentales específicos, como los trastornos bipolares, los trastornos del pensamiento y los trastornos relacionados con el estrés, entre otros.

Habla apresurada
Especialidad Psiquiatría, Psicología clínica

Descripción

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El habla apresurada es un discurso incesante, rápido, a menudo fuerte y sin pausas. Quienes presentan habla apresurada no responden a señales verbales y no verbales que indican que otros desean hablar, pasando de un oyente a otro o hablando incluso cuando no quedan oyentes.

Causas

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Síntomas de trastornos mentales

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El habla apresurada ocurre principalmente en los trastornos bipolares, durante los episodios hipomaníacos y maníacos.[3][1]

También se presenta debido a un estrés agudo o crónico en el trastorno de estrés postraumático (TEPT).[4][5]​ Los síntomas de los trastornos del pensamiento, como la fuga de ideas, pueden inducir habla apresurada, con ciertos grados de circunstancialidad o tangencialidad.[6]​ También es un síntoma directo o indirecto de trastornos de ansiedad,[7]trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH),[8]trastorno del espectro autista,[9]​ y esquizofrenia.[10]

Estimulantes

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Los estimulantes como la cocaína o las anfetaminas pueden causar un discurso similar al habla apresurada en individuos con psicopatología preexistente y producir síntomas hipomaníacos o maníacos en general, debido tanto a las propiedades de la sustancia como a la naturaleza subyacente de la psique del individuo. En muchos trastornos psicóticos, el uso de ciertas drogas amplifica ciertas expresiones de síntomas, y el habla apresurada inducida por estimulantes es uno de ellos.

Efectos

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El habla apresurada puede llevar al tartamudeo, por ejemplo, cuando las personas desean expresarse más rápido de lo que su capacidad les permite articular sus pensamientos.[11]

Trastornos relacionados

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  • La taquifemia es un trastorno del habla relacionado con el habla apresurada en el sentido de que el discurso de una persona con taquifemia suena mal verbalizado. Sin embargo, la taquifemia es un trastorno del lenguaje distinto. Aunque la taquifemia suena casi idéntica al habla apresurada, se diferencia en que el habla apresurada está arraigada en la ansiedad, mientras que la taquifemia no lo está.
  • El habla apresurada es un caso de taquilalia, o habla rápida. También está relacionada de diversas formas con la agitolalia, la agitofasia y la verbomanía.
  • El habla circunstancial o circunstancialidad es un trastorno de la comunicación en el que el enfoque de una conversación se desvía.[12]​ En la circunstancialidad, los detalles innecesarios y los comentarios irrelevantes causan un retraso en llegar al punto.[13]

Véase también

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Referencias

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  1. a b Videbeck, Sheila (2010). Psychiatric-Mental Health Nursing (5th edición). Lippincott Williams and Wilkins. pp. 186, 303, 305. ISBN 978-1605478616. 
  2. Organización Mundial de la Salud (2023). "Habla apresurada". Clasificación Internacional de Enfermedades, undécima revisión – CIE-11. Ginebra – icd.who.int.
  3. «Pressure of speech». General Practice Notebook. Consultado el 15 de junio de 2023. 
  4. Keane, Terence M. (Verano 2013). «Patient management exercise: post-traumatic stress disorder». Clinical Synthesis 11 (3): 352-357. doi:10.1176/appi.focus.11.3.352. 
  5. O'Connor, Manjula (2020). «Adjunctive therapy with brexpiprazole improves treatment resistant complex post traumatic stress disorder in domestic family violence victims». Australasian Psychiatry 28 (3): 264-266. PMID 31896271. S2CID 209672155. doi:10.1177/1039856219889303. 
  6. Stevens, Lesley; Rodin, Ian (23 de abril de 2001). Psychiatry: an illustrated colour text. Elsevier Health Sciences. pp. 24-. ISBN 978-0-443-05703-8. Consultado el 25 de noviembre de 2010. 
  7. Banazak, Deborah A. (1997). «Anxiety disorders in elderly patients». The Journal of the American Board of Family Practice 10 (4): 280-289. PMID 9228623. 
  8. Baroni, Argelinda; Lunsford, Jessica R.; Luckenbaugh, David A.; Towbin, Kenneth E.; Leibenluft, Ellen (Marzo de 2009). «Practitioner Review: The assessment of bipolar disorder in children and adolescents». Journal of Child Psychology and Psychiatry 50 (3): 203-215. PMC 2786990. PMID 19309325. doi:10.1111/j.1469-7610.2008.01953.x. 
  9. Kroncke, Anna P.; Willard, Marcy; Huckabee, Helena (Febrero de 2016). «Emotions, mood, behavior, and adaptive assessment». Assessment of autism spectrum disorder. Springer. ISBN 978-3-319-25504-0. 
  10. Sakakibara, Eisuke; Nishida, Takuji; Sugishita, Kazuyuki; Jinde, Seiichiro; Inoue, Yushi; Kasai, Kiyoto (Julio de 2012). «Acute psychosis during the postictal period in a patient with idiopathic generalized epilepsy: Postictal psychosis or aggravation of schizophrenia? A case report and review of the literature». Epilepsy & Behavior 24 (3): 373-376. PMID 22652424. S2CID 10873224. doi:10.1016/j.yebeh.2012.04.127. 
  11. Perkins, William H. (1 de enero de 1993). «What Is Stuttering and Why?». En Boberg, Einer, ed. Neuropsychology of stuttering. University of Alberta. p. 226. ISBN 978-0-88864-239-4. Consultado el 13 de diciembre de 2010. 
  12. Green, Ben (2009). [[[:Plantilla:GBurl]] Problem-Based Psychiatry]. Abingdon: Radcliffe. p. 15. ISBN 978-1-84619-042-1. 
  13. «Circunstancialidad». Dorland's Medical Dictionary Online. Consultado el 15 de junio de 2023. 

Enlaces externos

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  •   Datos: Q7241734