En España, el gentilhombre (plural «gentileshombres» o «gentilhombres»)[1] era la persona que despachaba al rey con un pliego de importancia para darle noticia de algún buen suceso,[2][3] como la toma de una plaza o el arribo de una escuadra. También recibía el nombre de gentilhombre el que servía en las casas de los grandes de España u otras para servir al señor o señora.[2]
En concreto, se distinguían las siguientes clases:
En la ciudad ecuatoriana de Chone, en la provincia de Manabí, se le llama Gentilhombre de Felipe V por mérito histórico al alcalde de dicho poblado cuando este asume su dignidad por votación popular. Si la persona elegida fuese mujer, se le aplicaría Gentildama de Felipe V.
También se puede definir como varón «de exquisita elegancia y educación»,[4] o de comportamiento caballeroso.[2]
El contenido de este artículo incorpora material del Diccionario Enciclopédico Hispano-Americano del año 1892, que se encuentra en el dominio público.