Los gádidos (Gadidae) son una familia de peces gadiformes. Incluye especies de importancia comercial como el bacalao, eglefino, merlán, abadejo o la faneca, siendo la segunda familia, después de los clupeidos, en cuento al volumen mundial de pesca.[1]
Gadidae | ||
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Bacalao (Gadus morhua) | ||
Taxonomía | ||
Reino: | Animalia | |
Filo: | Chordata | |
Clase: | Actinopterygii | |
Orden: | Gadiformes | |
Familia: |
Gadidae Rafinesque, 1810 | |
Géneros | ||
Arctogadus | ||
Su nombre procede del latín gadus, que significa bacalao.[2]
Aparecen por primera vez en el registro fósil en el Oligoceno, a mitad del Terciario.[3]
Se ha descrito una longitud máxima de hasta 2 m en Gadus morhua; es característica en todas las especies la presencia de tres aletas dorsales y dos aletas anales, todas ellas sin espinas, con la base de las aletas pélvicas por delante de las pectorales; en la boca el hueso vómer tiene dientes, y normalmente presenta bigotes.[1]
Los miembros de esta familia se distribuyen fundamentalmente por las zonas circunpolares[aclaración requerida] y aguas templadas, la mayoría en el hemisferio norte.[1]
La mayoría de las especies son bentobentopelágicas, alimentándose de otros peces e invertebrados; es frecuente en muchas de las especies de gádidos la agrupación en bancos de juveniles que migran largas distancias.[1]
Tras algunos cambios recientes, de géneros llevados a otras familias y la antigua familia Ranicipitidae que ha sido incluida dentro de ésta, se consideran en la familia Gadidae un total de 24 especies válidas, agrupadas en 13 géneros:[4]