El Frente de Izquierda Revolucionaria (FIR) fue una agrupación guerrillera trotskista peruana activa entre los años 1961 y 1962. Su creación fue impulsada por Partido Obrero Revolucionario (POR), siendo desarticulada en 1962 tras protagonizar dos asaltos bancarios para financiar el inicio de su accionar subversivo.
Frente de Izquierda Revolucionaria | ||
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![]() Bandera del FIR. | ||
Fundadores | Partido Obrero Revolucionario | |
Operacional | 1961 - 1962 | |
Regiones activas |
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Ideología | Trotskismo | |
Posición | Extrema izquierda | |
Acciones notables | Asalto a bancos | |
Estatus | Desarticulado | |
En 1960, el Partido Obrero Revolucionario (POR) organiza un congreso donde delinea un programa de lucha armada a través de una guerra de guerrillas. Para ello, el POR decide crear un frente revolucionario para unir a la izquierda peruana.[1]
El Frente de Izquierda Revolucionaria (FIR) nace en diciembre de 1961 impulsada por el POR para unir a la izquierda con el movimiento campesino. El FIR estuvo conformado por militantes del POR, disidentes del Partido Comunista Peruano e independientes. Entre sus más destacados miembros estuvo Juan Pablo Chang y Hugo Blanco, miembro de la Federación Provincial de Campesinos de La Convención y Lares y militante del POR. Aunque inicialmente confluían en el FIR diversas tendencias ideológicas, terminó adoptando el trotskismo como ideología, lo que originó desconfianza en otras organizaciones de izquierda.[2][3][4][5][6][7]
El FIR estuvo conformado por algunas decenas de militantes. En su programa, dieron su respaldo a la ocupación de tierras, además de defender la revolución cubana, promover la confiscación de tierras, la nacionalización de empresas extranjeras y la "reforma urbana y el gobierno de los trabajadores". Para financiar la lucha armada, tomaron contacto con Palabra Obrera, liderado por el dirigente trotskista argentino Nahuel Moreno, quienes prometieron a los firistas enviarles dinero, que no se cumplió. Ante la falta de recursos, el FIR realizó el robo de dos bancos en Lima (el primero en diciembre de 1961 y el segundo en abril de 1962), siendo dichos asaltos organizados por miembros enviados por la Secretariado Latinoamericano del Trotskismo Ortodoxo (SLATO) y liderados por Daniel Pereyra. Tras el asalto, a fines de abril de 1962, los asaltantes se trasladaron al Cusco para unirse a las labores realizadas por Blanco con el campesinado, siendo detenidos luego de atacar una patrulla que inspeccionaba el camión que los trasladaba hiriendo, en el proceso, al sargento Natividad Cáceres. Luego de ser detenidos, se recuperó lo robado. Además, se detuvo a otros firistas en Cusco, Puno y Lima.[1][2][3][6][8][9] Las detenciones dejaron desarticulado al FIR, quienes tenían como objetivo lanzar la guerra de guerrillas el 10 de junio de 1962.[1][8]