El Fondo de Inversión Social o FIS | Ameris es el primer fondo de inversión privado (FIP) en Chile cuyo objetivo es invertir en empresas e instituciones sociales con necesidad de financiamiento para crecer y alcanzar autosustentabilidad. Este fondo ofrece en Chile una solución para “inversionistas sociales” que buscan una inversión que tenga, además de una rentabilidad económica, un alto impacto social.
El FIS, que a la fecha de febrero de 2018 está en el amparo de Ameris Capital, ha levantado dos fondos de inversión de impacto. El primero, en 2010 por un monto de USD $4.5 MM, ya fue invertido en 7 instituciones o proyectos. El segundo, FIS 2.0, por un monto de USD $7.5 MM, se encuentra activo desde agosto de 2017 y ya ha realizado dos inversiones de etapa temprana.
El Fondo de Inversión Social (FIS | Ameris) es un Fondo de Inversión de carácter privado con un objetivo de inversión en instituciones y empresas sociales, las cuales requieren recursos para poder seguir desarrollando su modelo y sean capaces de poder conseguir su auto sustentabilidad operativa. Este fue desarrollado y administrado en sus inicios (2010) por Claro y Asociados, empresa con trayectoria en Chile asesorando a compañías en Finanzas Corporativas, Consultoría Estratégica. En 2014, Claro y Asociados pasa a llamarse Ameris Capital.[1][2]
El modelo de funcionamiento del FIS busca ser un puente entre inversionistas y estas organizaciones con un objetivo de solucionar problemáticas sociales, principalmente aquellos sectores más vulnerables de la base de la pirámide, y que no han sido atendidos por las instituciones públicas y privadas tradicionales.
Su historia comienza con el primer levantamiento de capital. Durante diez meses, entre noviembre de 2009 y agosto del 2010, se desarrolló el proceso llamado roadshow , en donde se identificó y trabajó con los potenciales inversionistas, entre ellos: inversionistas privados (empresas y familias de alto patrimonio), fundaciones y agencias de desarrollo.[3]
Posterior al levantamiento de capital, en octubre de 2010 se realiza el lanzamiento del primer Fondo de Inversión Social en Chile, con 21 aportantes, USD $4.5 y una duración de 10 años. En 2011, el FIS realiza su primera inversión en Lumni, con quiénes se crea el Fondo Ilumina, destinado a financiar la educación técnico profesional de 196 alumnos con bajo acceso a financiamiento. El mismo año, se invierte en el segundo proyecto, la ATE Promoeduc, perteneciente en ese entonces a la Fundación Fé y Alegría Chile. La segunda inversión buscaba potenciar el desarrollo y cobertura de los servicios de Promoeduc, una empresa que brinda Asistencia Técnica Educativa Externa, para mejorar la calidad de educación en colegios con alumnos vulnerables del sistema.
Los años siguientes se continúa con el proceso de inversión, evaluando decenas de proyectos cada año, en un largo proceso de estudio y evaluación de cada caso. En 2013 se invierte en la fundación La Protectora de la Infancia, para la ampliación de infraestructura del colegio Luis García de la Huerta, permitiendo acceder a Jornada Escolar Completa (JEC). Luego, también en 2013, se invierte en TECHO, para la compra de terrenos en áreas estratégicas con objetivo de construcción de viviendas sociales. El mismo 2013, se realiza el primer cierre del portafolio: en menos de dos años, Promoeduc logra su sostenibilidad económica por lo que prepaga al FIS y culmina el proceso de crecimiento.
El quinto proyecto del portafolio, fue el CEIA Quimahue, con quienes se invierte, en 2014, en un nuevo edificio que permite duplicar la matrícula del establecimiento que ofrece oportunidades de estudios a alumnos (adultos) excluidos del sistema educativo.
En el año 2015 se invierte en el desarrollo del área de bidones de la empresa B Late!, quienes donan el 100% de sus utilidades a fundaciones. Finalmente, en 2016, se realiza la última inversión del primer fondo en la empresa recicladora y comercializadora de e-waste, Chilerecicla.
Durante todo el período activo del fondo, hasta la actualidad, las actividades han incluido el apoyo en la gestión de los distintos proyectos de la cartera, correspondiente a la tercera etapa de la implementación del fondo. Los resultados sociales alcanzados por los proyectos se resumen en la siguiente cita:
"Entre los años 2010 y 2016, el FIS invirtió en siete proyectos de impacto social y ambiental, materializando inversión por US$4,5 millones y generando un impacto a la fecha de: 10.448 personas de la Base de la Pirámide beneficiadas, 998 toneladas de residuos eléctricos procesadas y 6 millones de pesos donados a ONGs (Diciembre 2017).
En junio de 2017 se realizó el lanzamiento del FIS 2.0, que cuenta con US$7,5 millones con el fin de continuar impulsando la inversión de impacto en nuestro país."[4]
Tal como se menciona en la fuente oficial del FIS | Ameris, a mediados de 2017 se realiza el lanzamiento del segundo fondo de inversión. El "FIS 2.0" se encuentra activo y actualmente en las etapas de búsqueda y selección de proyectos, además de unas primeras inversiones tempranas.
El Fondo de Inversión Social es administrado por Ameris Capital. Se supervisa a los proyectos que participan del Fondo de manera que cumplan con los criterios de retorno económico y social. Su estructura contempla la participación de distintos agentes, entre ellos:
La Misión del FIS es “poder buscar y seleccionar empresas e instituciones sociales con alto impacto social y que tengan necesidad de financiamiento para crecer y alcanzar sustentabilidad operativa y lograr generar retornos financieros”. Como objetivo adicional el FIS busca poder hacer un seguimiento a las inversiones con el objetivo adicional de apoyar la gestión de las instituciones y compartir las mejores prácticas de las mismas en la sociedad.
Hasta febrero de 2018, las inversiones realizadas contemplan principalmente la emisión de deuda para la institución o empresa que recibe los recursos financieros. Además, se participa de las instituciones sociales mediante equity.
Los criterios de inversión del FIS contemplan requerimientos solicitados a las instituciones que postulen, las cuales pueden ser desde una Organización sin ánimo de lucro hasta sociedades con fines de lucro.
El FIS establece a través de 3 etapas la implementación de este fondo.
El FIS mide su impacto social a través del sistema de GIIRS (Global Impact Investing Rating System) de forma de poder contar con un sistema transparente para el mercado y los inversionistas. Por otro lado el FIS monitorea la evolución del impacto social de sus inversiones a través de los resultados sociales que estos generan.
En las últimas dos ediciones, 2016 y 2017, el FIS fue reconocido como uno de los "Best for the World Funds" por B the Change.[6]
En su primera versión, el FIS actualmente cuenta con 6 proyectos de inversión activos y uno cerrado. Los proyectos son:
En su segunda versión, el FIS 2.0, ha invertido hasta ahora en dos proyectos de etapa temprana: