Los sellos rusos han sido extensamente falsificados. Tanto los escasos y los sellos comunes y, por ejemplo, aquellos del ejército del Norte, son más comunes los falsos que los auténticos.[1]
Un ejemplo muy conocido de falsificación implica la primera estampilla publicada en la Rusia Imperial. Dado que la perforadora no estaba disponible, éstos fueron publicados imperforados en diciembre de 1857. Para enero, las máquinas estaban a punto y la misma estampilla fue publicada con perforaciones. La estampilla imperforada es, consecuentemente, más rara que la que tiene perforación.
Falsificaciones de sellos rusos se pueden dividir :[cita requerida]