Et-Tell (en árabe: التل) es un yacimiento arqueológico situado en la ribera oriental del río Jordán, a escasos dos kilómetros de su desembocadura en el lago de Galilea. Los estudiosos lo identifican generalmente con la capital del reino de Guesur, y algunos lo identifican también con Betsaida.[1]
Et-Tell | ||
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Ubicación | ||
País |
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Coordenadas | 31°55′00″N 35°17′18″E / 31.916667, 35.288333 | |
Descubrimiento y hallazgos | ||
Arqueólogos | Rami Arav | |
Las excavaciones indican que el sitio arqueológico fue habitado desde la Edad de Bronce, pero que la ciudad recobró importancia a partir del s. X a. C., ya en el período bíblico.[2] Los expertos suelen identificarla con la capital del reino de Guesur, un reino aliado de Israel.[3]
Los hallazgos arqueológicos más imponentes, sobre todo las puertas de la ciudad en el estrato V, se han fechado en el s. VIII a. C., y por lo tanto ya en una época posterior al reino de Guesur. Sin embargo, en 2016 los arqueólogos declararon estar cerca de localizar la puerta de la ciudad del s. X a. C.[3] El asentamiento de et-Tell site parece haber sido la ciudad más grande y fuerte al este del Jordán durante la Edad de Hierro II (1000-800 a. C.).[4]
En julio de 2018 un grupo de veinte arqueólogos, dirigidos por Rami Arav, descubrieron una estructura que identificaron como puerta de la ciudad. De manera provisional, identificaron el sitio con la ciudad bíblica de Zer, un nombre que se usó durante el período del primer templo.[5]
Et-Tell tenía una población mucho menor durante los siglos en torno a era cristiana.[6] Las excavaciones arqueológicas han revelado material de pesca, incluso algunos pesos de cuero usados para las redes, así como agujas de coser para reparar redes. Estos hallazgos indicant que la economía de la ciudad se basaba en gran parte en la pesca. Dos monedas de plata datadas en el año 143 a. C. fueron encontradas en el lugar, así como algunas monedas de bronce de tiempos de Alejandro Janeo (103-76 a. C.), así como una moneda de tiempos de Herodes Filipo, que era el Tetrarca de la región durante las primeras décadas del s. I. (4 a. C. - 34 d. C.).[7]
Según Arav, habría que identificar et-Tell con Betsaida. Aunque la distancia entre et-Tell y el Lago de Galilea (unos dos kilómetros) supone un problema para esta identificación con un pueblo de pescadores, se han aducido las siguientes hipótesis para solucionar este problema:
La primera exploración arqueológica de et-Tell se llevó a cabo en septiembre de 1928 bajo la supervisión de John Garstang. Se excavaron ocho trincheras: cinco contra el lado exterior de la muralla sur de la ciudad y tres dentro de la propia ciudad. El resultado de esta excavación nunca se publicó formalmente, y el único informe conocido es un resumen de tres páginas presentado por Garstang al final del trabajo. En un libro posterior, Garstang afirmó que en esta excavación se encontró cerámica de la Edad del Bronce Final, que dataría de aproximadamente el 1400 a. C., pero esta cerámica no se mencionó en su resumen anterior del trabajo y ahora no se puede localizar.
La siguiente excavación en et-Tell se llevó a cabo durante tres temporadas entre 1933 y 1935, y fue dirigida por Judith Marquet-Krause, con el apoyo del barón Edmond de Rothschild. Una cuarta temporada de excavación se vio interrumpida por el prematuro fallecimiento de Marquet-Krause en julio de 1936. Sin embargo, su esposo compiló un catálogo de los objetos encontrados en la excavación y lo publicó en 1949..[8] Esta campaña se centró en la región superior del montículo, las zonas expuestas de la acrópolis y una aldea que data de la Edad de Hierro.[9]
Otra campaña en et-Tell fue la de la Expedición Arqueológica Conjunta (Joint Archaeological Expedition), se llevó a cabo en nueve temporadas, de 1964 a 1970, bajo la supervisión de Joseph Callaway y la American Schools of Oriental Research. Se abrieron ocho nuevos yacimientos en et-Tell en zonas próximas a la expedición de Marquet-Krause y a lo largo de las murallas de la parte baja oriental de la ciudad, y se inspeccionaron tres yacimientos más pequeños en los alrededores para crear un perfil arqueológico más completo de la región.
Nuevas excavaciones fueron llevadas a cabo entre 1987 y 1989 por el Golan Research Institute.
Una expedición más reciente, dirigida por Hani Nur el-Din, de la Universidad Al-Quds, inspeccionó el yacimiento en 2003 y realizó excavaciones centradas en el límite oriental del tell en 2005 y 2007.[10][11]
En 2008-2010, y en 2014, Rami Arav, en nombre de la Universidad de Nebraska realizó nuevas excavaciones arqueológicas.[12]