Erico el Elocuente (Latín: Ericus Desertus) fue un guerrero vikingo de Noruega que Saxo Grammaticus presenta en su obra Gesta Danorum (Libro 5) como hijo de Regnerus (Ragnar), y ambos estaban al servicio de un rey noruego llamado Gøtarus (Götar), todos ellos totalmente desconocidos y ausentes en las sagas nórdicas. Erik parece ser el mismo personaje que menciona Snorri Sturluson en su Skáldskaparmál,[1] uno de los Ylfings. Al margen de esta cita, no hay más registros que aclaren mucho más sobre él, su familia o su reino de origen.
Saxo menciona una larga lista de proezas protagonizadas por Erik, quien llegó a ser consejero de Fróði, hijo de Fridleif, rey de Dinamarca. Las incursiones vikingas de Erik a favor de Fróði siempre fueron bien por la versatilidad de palabra que tenía Erik. Finalmente, Erik casó con la hermana de Fróði, llamada Gunvara y un hermanastro mayor de Erik llamado Rollerus (Roller), llegó a ser un rey de Noruega.
Saxo cita al rey de los suiones llamado Alricus (nórdico antiguo: Alrekr). Posiblemente se trata del mismo rey Alrek que aparece en la saga Ynglinga, Ynglingatal,[2] Historia Norwegiæ[3][4] e Íslendingabók.[5]
Alricus estaba en guerra contra Gestiblindus, rey de los gautas y Gestiblindus buscó la ayuda de Fróði.[6]
Erik y otro vikingo llamado Skalk de Skåne fueron a la guerra y mataron al hijo de Alrek, Gunthiovus (nórdico antiguo: Gunnþjófr) caudillo de Vermelandia y Solør. Entonces se celebró una reunión secreta entre Alrik y Erik, donde Alrik intentó doblegar a Erik a favor de su causa. Cuando se rompieron las negociaciones, Alrek pidió sustituir la guerra por un combate simple entre él y Gestiblindus. Erik se negó ya que Gestiblindus estaba de baja forma y además era un hombre de edad avanzada, por lo que hizo otra propuesta: enfrentarse él mismo a Alrek. La lucha siguió a las palabras, Alrek murió y Erik quedó muy malherido y la falsa noticia sobre su fallecimiento llegó al rey Fróði. Contra pronóstico, Erik se recuperó y regresó más tarde a la corte de Fróði como caudillo de Sueonia, Vermelandia, Helsingia y Soleyar. Un satisfecho Fróði le cedió entonces otras tierras para que Erik las gobernase en su nombre: Laponia, Finlandia y Estonia, territorios sometidos a tributos anuales.
Saxo menciona que Erik fue el primer sueco llamado así y que a partir de entonces, Erik se convirtió en un nombre común entre los reyes suecos. También explica que Erik ayudó a Arngrim; una cita que coincide con hechos de la saga Hervarar, cuando los hijos de Arngrim se encuentran con el sucesor de Erik, el rey Yngvi.[7]
Al principio del libro 6, Saxo cita que Erik murió de una enfermedad y le sucedió en el trono “Haldanus” (Halfdan).
Erik fraekni Skjoldsson (n. 544) o Eirík el Elocuente (nórdico antiguo: Eiríkr inn málspaki), según la saga Hálfs saga ok Hálfsrekka, fue un caudillo vikingo de Noruega,[8] rey de Hordaland, padre del rey Alrek de Hordaland y abuelo del legendario rey Vikar.[9]
En Skáldskaparmál, Snorri Sturluson menciona a Eirík como cabeza del clan familiar de los Ylfings y descendiente de la dinastía Ödling: