El Amigo del Obrero fue un periódico editado en la ciudad española de Granada de manera intermitente en tres épocas: entre 1896 y 1897, en 1898 y en 1901.
El Amigo del Obrero | ||
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País | España | |
Sede | Granada | |
Fundación | octubre de 1896 | |
Fin de publicación | octubre de 1901 | |
Ideología política | carlismo | |
Idioma | español | |
Fue fundado por el herrero Francisco Guerrero Vílchez en octubre de 1896. De periodicidad semanal, aparecía los martes y tenía su redacción en el Círculo tradicionalista.[1] Los carlistas granadinos, que se hallaban divididos,[2] contaban en aquel momento con otro periódico local, La Voz de Granada.[3] Tanto este último como El Amigo del Obrero sufrirían procesos judiciales debido a sus escritos.[4] Suspendió su publicación en junio de 1897.[5]
En abril de 1898 inició su segunda época.[6] Entre otras cosas, pidió mejoras en el Campo de los Mártires[7] y viviendas para obreros.[8] Su director, Guerrero Vílchez, y el redactor principal, Eugenio Zabala, fueron encarcelados en junio de 1898 por orden de la autoridad militar.[9] Guerrero Vílchez fue sometido a un consejo de guerra.[10] También fue procesado uno de sus colaboradores, Carlos Cruz Rodríguez, por delitos de imprenta.[11] Dejó de publicarse en verano porque no logró ver realizadas ciertas promesas de protección por parte de los «conspícuos» que constituían la Junta tradicionalista de Granada.[12]
El 1 de marzo de 1899 Guerrero Vílchez fundó en Granada otro semanario carlista, La Verdad,[13] pero tras la prohibición a la prensa carlista con motivo de la sublevación de Badalona en octubre de 1900, tuvo que cambiarle de nombre, que pasó a ser primero El Españolista[14] y luego El Amigo del Obrero, que reapareció el 9 de mayo de 1901, titulándose solamente «católico españolista» y declarando que no seguía política alguna.[15] En esta tercera época tuvo como redactor al joven Mariano Rodríguez Maza (Mazanini),[16] antiguo redactor del periódico carlista madrileño La Escoba, por cuyos artículos había sido condenado en 1898 a dos años de prisión.[17] Levantada la prohibición a la prensa carlista, en octubre del mismo año anunció que volvía a publicarse con el título de La Verdad.[18]