Ecoturismo con lupa es un término acuñado por el Dr. Ricardo Rozzi[1] y sus colegas para referirse a un especial nuevo turismo, que es promovido en la reserva de la biósfera del Cabo de Hornos. Dando la posibilidad de descubrir la diversidad excepcional de musgos, líquenes y hepáticas en el archipiélago (el 5% del total mundial), Rozzi ha invitado a los operadores del turismo para poner este lema en su ofrecimiento para la región y para aprovecharse de estos escaparates de promoción de la biodiversidad para la flora no-vascular.[2]
En contrapartida, Rozzi y el Parque etnobotánico Omora han denominado metafóricamente a estas pequeñas comunidades vegetales el «Bosque en miniatura del Cabo de Hornos» para ayudar a entender a un sector más amplio de la sociedad el papel ecológico que juegan estos minúsculos pero diversos y abundantes organismos.
El "Ecoturismo con una lupa" ha sido ligado a un ritual de veneración a la Naturaleza por el etnógrafo Bron Taylor en su libro Dark Green Religion.[3]